Por ANULFO MATEO PÉREZ
I
La ultraderecha de EEUU, opuesta al restablecimiento de las relaciones
diplomáticas de ese país con Cuba, colocará “piedras en el camino” a todo paso
dirigido al cese del bloqueo económico, comercial y financiero contra La Habana,
y al intercambio científico, cultural, deportivo y de solidaridad.
Esos halcones han iniciado una nueva guerra mediática contra la Isla, sacando
de los archivos asuntos olvidados que han puesto en primer plano, para torpedear
un mayor acercamiento entre EEUU y Cuba.
Se trata de diferendos durante la Guerra Fría, que luego tomaron un bajo
perfil, relacionados con el tema de asilos políticos a ciudadanos
estadounidenses, acusados de violar las leyes de su país hace unos 30 años.
Esa ultraderecha argumenta ahora, que algunos de los fugitivos más buscados
por EEUU hicieron nuevas vidas en Cuba, se casaron, tuvieron hijos y durante
décadas han continuado residiendo allí con tranquilidad.
Se lamentan amargamente que esos ciudadanos estadounidenses se volvieron
“elementos” habituales en sus modestos vecindarios de La Habana, mientras sus
casos eran olvidados en gran medida en EEUU.
Entre estos incluyen a Joanne Chesimard (Assata Shakur), integrante de las
Panteras Negras, declarada culpable en 1977 por la muerte de un agente de
caminos de Nueva Jersey y sentenciada a cadena perpetua.
El ultraderechista gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, posible
candidato presidencial para 2016, ha pedido al presidente Obama exigir el
regreso de Shakur antes de restaurar las relaciones con La Habana.
De quien no hablan es de Luis Posada Carriles, terrorista de origen cubano y
residente en EEUU; ex agente de la CIA; autor de la voladura, en 1976, de la
aeronave de Cubana de Aviación, donde murieron 73 personas.
II
La estrategia de la ultraderecha estadounidense, y sus aliados a nivel
mundial, es impedir unas relaciones diplomáticas estables entre Washington y La
Habana y obstruir el cese del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto
contra Cuba, aunque para ello tenga que asumir acciones extremas
recurrentes.
Ahora ha retomado la mendaz acusación de que la Isla patrocina el fraude al
mayor servicio público de salud de EEUU (Medicare), a través de cubanos que
luego huyen y se refugian en su país, evadiendo la justicia.
Aunque el restablecimiento de las relaciones diplomáticas EEUU-Cuba ha tomado
un tanto desprevenida a esa ultraderecha, sus provocaciones continuarán
dirigidas a torpedear la paz entre las dos naciones.
La más reciente de ellas, es la de un grupúsculo de “activistas”, encabezado
por la bloguera Yoani Sánchez, quien ha planeado presentar un destemplado
espectáculo en la emblemática Plaza de la Revolución.
La creadora Tania Bruguera, socia de Yoani Sánchez, presentaría un presunto
“performance”, telón de fondo de una provocación política, rechazada por la
Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
Esa acción se suma a los planes conspirativos contra la Revolución, tales
como el programa ZunZuneo, patrocinado por la USAID y dirigido a crear
disturbios sociales azuzando a jóvenes a través de la red de Internet.
Aunque el Senado de EEUU contemplaría prohibir a USAID gastar dinero en ese
tipo de programa en países que rechazan la ayuda de la agencia, las
provocaciones encubiertas contra Cuba continuarán.
Los violentos no han entendido aún, que la sociedad cubana ha resistido
durante más de 50 años las embestidas del imperio más poderoso que jamás haya
existido, y no se rendirá ni cambiará el curso de su historia.
Raíces Radio
domingo, 28 de diciembre de 2014
martes, 23 de diciembre de 2014
El futuro de Cuba
Por ANULFO MATEO PÉREZ
El
restablecimiento de los nexos entre Estados Unidos y Cuba es entendido por la
comunidad internacional como el preludio que daría paso al desmonte del abusivo
bloqueo económico, comercial y financiero de parte de Washington contra la Isla, impuesto por más de 50
años y carente de legalidad y legitimidad.
Ese
cerco económico, entre otras agresiones, le ha costado a Cuba pérdidas
estimadas en más de un billón de dólares, perjudicando su desarrollo integral en
todos los órdenes y sus relaciones multilaterales.
Con
firmeza, Fidel y Raúl siempre han planteado que un acuerdo para normalizar las
relaciones EEUU-Cuba tendría que ser mediado por el respeto al derecho
internacional y a la Carta
de Naciones Unidas.
Hay
que entender que la reanudación de los vínculos diplomáticos expresan sólo un
gesto de acercamiento, que no entraña necesariamente “fumar la pipa de la paz”,
entre dos países con marcadas diferencias.
Las
mismas que provocan las tensas relaciones que EEUU mantiene con China, Rusia y
Venezuela, entre otros países, por su política exterior injerencista y
expansionista, guiada desde 1823 por la Doctrina Monroe.
No
obstante, ese acercamiento puede facilitar el cese del bloqueo económico, que
beneficiaría a ambos países, y para lo que Cuba está más que preparada en
términos políticos desde hace muchos años.
El
momento que vive Cuba es un gran desafío para el Partido Comunista, sus
dirigentes, la clase obrera, trabajadores del campo, jóvenes y mujeres, organizaciones
de masas… para su pueblo valiente y abnegado.
El
futuro de Cuba no puede ser otro que la reafirmación de sus conquistas socialistas
en la salud, educación, deporte, el arte, la equidad social, económica y de
género, en el marco de la dignidad y soberanía nacional.
domingo, 14 de diciembre de 2014
Cinismo y terrorismo imperial
Por ANULFO MATEO PÉREZ
Con
la decisión de ambas cámaras del Congreso de aplicar nuevas sanciones draconianas
contra Venezuela, el decadente imperio estadounidense continúa con su vieja
política exterior de hostigar a otros países, en franca violación al derecho
internacional y a las relaciones de paz entre naciones.
En
un ejercicio de cinismo e hipocresía, el republicano Ed Royce, manifestó que su
país "envía un mensaje contundente de apoyo a todos los venezolanos que
anhelan libertad, democracia y el imperio de la ley".
El
presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja de los
EEUU olvidó que mientras él se refiere en esos términos a Venezuela, en su país
se reprime y estalla el escándalo de las torturas de la CIA.
No
sólo eso, mister Ed Royce borró de su memoria que el agente de policía que mató
en agosto a Michael Brown, un joven afroamericano en Ferguson (Misuri), sigue
libre y no afrontará un proceso judicial.
El
senador demócrata Robert Menéndez, uno de los autores del proyecto de ley para
sancionar a Venezuela, fue investigado por el FBI por negocios turbios con
Aduanas en República Dominicana.
A las
injustas y abusivas medidas contra la patria de Bolívar, les preceden acciones
terroristas y conspiraciones, para socavar su estabilidad y propiciar el
derrocamiento del presidente Nicolás Maduro.
Lo
mismo ocurre contra Rusia y Cuba, afectadas por leyes extraterritoriales y
sanciones económicas arbitrarias que le provocan pérdidas billonarias, que
vulneran igualmente el derecho internacional.
Ante
que hostigar a otras naciones, bien debería EEUU estudiar por qué sus
manufacturas se han contraído, se acelera la transferencia de capitales y
tecnología hacia otros países y su deuda externa sobrepasa los 10 trillones de
dólares.
sábado, 6 de diciembre de 2014
Método de perpetuación política
Por ANULFO MATEO PÉREZ
I
Para mantenerse en el poder, la cúpula de la corporación PLD ha venido estableciendo un sistema de control social, mediante el conocimiento, análisis, evaluación periódica y sometimiento de los sectores más vulnerables de la sociedad, dominio que se puede hacer añicos por las agudas contradicciones de clases.
Las luchas de los sectores populares hacen que ese control social pierda efectividad y la base de sustentación del sistema se resquebraje por la obsolescencia, anacronismo e incapacidad de reproducción viciosa del poder.
El peledeismo gobernante ha ido desarrollando una capacidad de control de la sociedad, que le permitiría la perpetuación en el poder, usando métodos que no son los estrictamente represivos, sino persuasivos.
Por eso su denodado empeño en procurar y mantener el dominio absoluto de las organizaciones sociales, sindicales, económicas, académicas y políticas para mantener el control de cada sector.
Los gobiernos del PLD han creado una burocracia dedicada a los controles más serios, es decir, policías, aparatos de “justicia”, servicios de información, oficinas ministeriales, económicos y de defensa.
Pero además, servicios internacionales, empresas “privadas” de seguridad, agentes sociales que llevan los informes de cada situación en el ámbito en que desarrollan sus actividades de “caliesaje”.
Los controles permanentes del PLD en la “vida privada” o “intimidad”, en la familia, volcados sobre y contra la mujer, juventud, artistas, deportistas y personas mayores le aseguran su pasividad y conformismo.
El conocimiento y los medios de manipulación de masas, son usados para legitimar el poder y la de una dictadura institucional. Pero “una cosa piensa el burro y otra el que lo apareja”, dice el refranero popular.
II
El control social al que han aspirado los aparatos del PLD y aspira el presente gobierno, conlleva una vigilancia estricta, y debo recordar que no hay control sin vigilancia, ni vigilancia sin control. Hay un tipo de vigilancia, que es más sofisticada, más peligrosa, porque esta va unida al castigo selectivo.
El método de control-vigilancia-castigo o represión viene siendo puesta en práctica desde hace algún tiempo. Los paleros de Leonel Fernández contra periodistas y manifestantes, es sólo un botón.
Como en los viejos tiempos de la Iglesia Católica, siglos XIII y XIV, y en los inicios de las tesis amaurianas, los gobiernos del PLD vienen aplicando, pero con nuevo estilo: Espionaje, infiltración, delación, tortura y hoguera.
Los métodos balagueristas están intactos en el peledeismo gobernante: escudriñan y escuchan el submundo de dimes y diretes, de rumores, común o extraño, raro, de los sujetos con vigilancia especial.
Todo esto para entronizar lo que ya echa raíces: una dictadura institucional de nuevo tipo. De ahí su febril afán por controlar de forma absoluta los tres poderes del Estado, así como a la sociedad civil.
La estrategia es asegurar la dominación con los sectores más conservadores, como también del movimiento sindical amarillista, sembrar el miedo y debilitar la movilización popular contra sus desafueros.
El accionar del peledeismo desde sus gobiernos ha creado una sensación de que nada se puede obtener si no es mediante la intervención del PLD y de las instituciones que domina o pretende dominar.
I
Para mantenerse en el poder, la cúpula de la corporación PLD ha venido estableciendo un sistema de control social, mediante el conocimiento, análisis, evaluación periódica y sometimiento de los sectores más vulnerables de la sociedad, dominio que se puede hacer añicos por las agudas contradicciones de clases.
Las luchas de los sectores populares hacen que ese control social pierda efectividad y la base de sustentación del sistema se resquebraje por la obsolescencia, anacronismo e incapacidad de reproducción viciosa del poder.
El peledeismo gobernante ha ido desarrollando una capacidad de control de la sociedad, que le permitiría la perpetuación en el poder, usando métodos que no son los estrictamente represivos, sino persuasivos.
Por eso su denodado empeño en procurar y mantener el dominio absoluto de las organizaciones sociales, sindicales, económicas, académicas y políticas para mantener el control de cada sector.
Los gobiernos del PLD han creado una burocracia dedicada a los controles más serios, es decir, policías, aparatos de “justicia”, servicios de información, oficinas ministeriales, económicos y de defensa.
Pero además, servicios internacionales, empresas “privadas” de seguridad, agentes sociales que llevan los informes de cada situación en el ámbito en que desarrollan sus actividades de “caliesaje”.
Los controles permanentes del PLD en la “vida privada” o “intimidad”, en la familia, volcados sobre y contra la mujer, juventud, artistas, deportistas y personas mayores le aseguran su pasividad y conformismo.
El conocimiento y los medios de manipulación de masas, son usados para legitimar el poder y la de una dictadura institucional. Pero “una cosa piensa el burro y otra el que lo apareja”, dice el refranero popular.
II
El control social al que han aspirado los aparatos del PLD y aspira el presente gobierno, conlleva una vigilancia estricta, y debo recordar que no hay control sin vigilancia, ni vigilancia sin control. Hay un tipo de vigilancia, que es más sofisticada, más peligrosa, porque esta va unida al castigo selectivo.
El método de control-vigilancia-castigo o represión viene siendo puesta en práctica desde hace algún tiempo. Los paleros de Leonel Fernández contra periodistas y manifestantes, es sólo un botón.
Como en los viejos tiempos de la Iglesia Católica, siglos XIII y XIV, y en los inicios de las tesis amaurianas, los gobiernos del PLD vienen aplicando, pero con nuevo estilo: Espionaje, infiltración, delación, tortura y hoguera.
Los métodos balagueristas están intactos en el peledeismo gobernante: escudriñan y escuchan el submundo de dimes y diretes, de rumores, común o extraño, raro, de los sujetos con vigilancia especial.
Todo esto para entronizar lo que ya echa raíces: una dictadura institucional de nuevo tipo. De ahí su febril afán por controlar de forma absoluta los tres poderes del Estado, así como a la sociedad civil.
La estrategia es asegurar la dominación con los sectores más conservadores, como también del movimiento sindical amarillista, sembrar el miedo y debilitar la movilización popular contra sus desafueros.
El accionar del peledeismo desde sus gobiernos ha creado una sensación de que nada se puede obtener si no es mediante la intervención del PLD y de las instituciones que domina o pretende dominar.
Prueba
la eficacia de la dependencia emocional y cognoscitiva que se alimenta de
dichas técnicas “disciplinadoras”. Algo así: “nadie viene al padre (alcanzar
una meta) sino por mí”. Pero el pueblo le tiene “el agua puesta”.
domingo, 16 de noviembre de 2014
Se avizora una crisis política
Por ANULFO MATEO PÉREZ
I
Se
avizora una crisis política a mediano plazo si el país no cambia de rumbo, dado
el franco deterioro del modelo en que se sustenta esta pseudo democracia, caracterizada
por la corrupción y el manto de la impunidad, inequidad en todos los ámbitos, represión
gubernamental y paraoficialista. Se
suman a esos factores, agudas contradicciones en la cúpula del poder político
en su sórdida lucha por el control absoluto del Estado y la preservación de
intereses grupales acumulados durante algo más de 14 años.
Esa
lucha mal disimulada se irradia hacia sus seguidores, y por lo visto tendrán
que caer algunos corruptos que se pasaron de la “raya de Pizarro” trazada por
el Departamento de Estado de Gringolandia.
Es
inocultable la putrefacción de los devaluados poderes del Estado, legislativo, judicial
y ejecutivo, que en firme alianza entre sí y junto al peledeismo gobernante
empujan a la confrontación social y política.
Se
agrega la indignación popular, que será cada vez mayor frente a tantas perversidades,
corrupción y justicia prostituida, articulada con las “mafias políticas” que abusan
del poder con absoluta impunidad.
Aunque
una gran parte de la prensa corporativa acalla o minimiza lo que acontece en
toda la geografía nacional, se advierten numerosas protestas por demandas
insatisfechas y las erráticas políticas estatales.
Los
dominicanos han llegado al hartazgo por los desafueros del gobierno de Danilo
Medina, y de otros que le precedieron, realidad que se pretende ocultar con multimillonarias
campañas mediáticas.
Guardando
cierta distancia, lo que ocurre en nuestro país nos recuerda el robo, dispendio,
desenfreno lascivo y juergas habituales de la decadente aristocracia europea del
siglo XVIII y XIX, que es mucho decir.
II
II
Se
avizora una crisis política al mediano plazo, si el PLD continúa aferrándose al
poder sin el respaldo de las mayorías, violentando las bases conceptuales de la
mentada y carcomida democracia representativa, apoyándose en el control
absoluto del Estado, JCE, TSE, TC y en la fuerza que estos le otorgan.
El
peledeismo gobierna sustrayendo los recursos públicos, aplicando el
clientelismo, envileciendo a una parte de la población que despierta y
ejerciendo un control social inspirado en el nacional socialismo alemán.
La
corporación morada NO se guía por las ideas liberales de Juan Bosch; sus
prácticas son neotrujillistas y neobalagueristas, que nos recuerdan también a la Alemania entre 1933 a 1945 y a Paul Joseph
Goebbels.
Así
como el PLD usa la política de la zanahoria, emplea el garrote contra
opositores y periodistas “desafectos”, verbigracia la acción de los paleros de
Leonel, olvidando que miedo y poder es una mezcla peligrosa.
Además
de auspiciar la corrupción, aplican la represión más primitiva para conculcar
derechos constitucionales e intimidar a los que NO asuman sus afanes
continuistas o se atrevan a confrontarlos.
El
PLD-gobierno encamina sus pasos hacia la consolidación del autoritarismo,
represión y exclusión, como signos de su acelerada crisis ética, moral y
política, así como de su progresiva decadencia.
El
continuismo peledeista y la proclama de gobernar hasta después de 2044, como lo
preconizara Leonel Fernández, es fruto del pánico de verse fuera del poder y
tener que responder a la justicia.
El
2016 podría retrotraernos a la crisis de 1978, por el ascenso de la oposición y
del movimiento popular; la lucha intestina en el PLD, su desgaste, previsible
fracaso electoral y tozudez para aceptar su derrota.
domingo, 2 de noviembre de 2014
Reelección y encuestas
Por ANULFO MATEO PÉREZ
I y II
La
reelección y el continuismo en la República Dominicana
han estado vinculados históricamente a regímenes que han conculcado los
derechos de sus ciudadanos. Esos gobiernos se dedicaron a saquear las arcas
públicas y a empeorar las condiciones de vida de los más pobres y de la clase
media.
Esos
desgobiernos, revolcados en corrupción y crímenes políticos, han sido rechazados
por generaciones que, en su momento, padecieron los rigores, por ejemplo, de la
gestión de Buenaventura Báez.
Igual
flagelación recibieron de Trujillo por 31 años y del dictador ilustrado Joaquín
Balaguer, cuyo dominio se extendió primero por 12 años, y luego de un receso de
ocho, por 10 años más de crímenes y corrupción.
El
PLD nos impuso a Leonel Fernández por tres períodos en que desgobernó y
profundizó los males del país, siguiendo los pasos de su mentor político, el
cortesano de la era de Trujillo, Joaquín Balaguer.
Esa
corporación peledeista, usando más de 40 mil millones de pesos de las finanzas
públicas y todo el poder del Estado, llevó al Palacio Nacional a Danilo Medina,
para darnos un período de la “España Boba”, con más de lo mismo.
Nos
sigue abrumando, al igual que en los gobiernos de Leonel Fernández, la pobreza
y el narcotráfico; nos abate la inseguridad, el desempleo y la corrupción,
analfabetismo y el hambre, entre otras miserias.
Ahora,
encuestas pagadas por los que siempre han favorecido la reelección de malos
gobiernos, falsean la realidad para que Danilo Medina continúe al frente del
Estado, y así esta terrible pesadilla.
Lo
que el país desea es salir de la corporación PLD y darse un gobierno que encamine
sus esfuerzos a enfrentar la pobreza, frenar la corrupción y llevar a la cárcel
a los que se han robado los recursos públicos.
II
II
Al
pueblo dominicano se le quiere empujar a una trampa, condicionándolo con falsas
encuestas. Pretenden crearle al elector el dilema de estar a favor o en contra
de la reelección presidencial; que siga Danilo Medina o que retorne Leonel
Fernández, como si se tratase de las únicas opciones.
Con
torpeza política se desea llevar la discusión al tema de quien gobernó peor, si
Leonel o Danilo, o limitarla a la conveniencia jurídica o no de cambiar el
texto constitucional respecto a la reelección presidencial.
Después
de tanto batallar contra la reelección y el continuismo, y sus efectos
deletéreos, desean retrotraernos al análisis histórico de lo acontecido durante
Horacio Vásquez y la dictadura de Trujillo.
La
discusión debe centrarse si es conveniente la reelección de este sistema
político y de una partidocracia corrompida y clases para las que gobiernan, o
un cambio a un sistema político que nos reivindique.
Esa
es la cuestión. Los grupos económico-sociales que heredaron el poder tras el
ajusticiamiento de Trujillo, en cada período se nutren de nuevos ricos, pero en
esencia son los mismos amos.
Sí.
Desde entonces y en esencia, vienen reeligiéndose los mismos verdugos; lo que
cambia en cada período de gobierno es la mano que sostiene el látigo. Y los
grandes males siguen acogotando a las mayorías.
Lo
pertinente es evitar la reelección de este sistema político, sus instituciones
y los grupos de poder que por igual han sumido a la mayoría del país en la
pobreza, imponiendo el caos y la corrupción más abyecta.
Las
opciones son continuar bajo el yugo o librarnos de él. El dilema es vivir
siempre bajo la dictadura de la partidocracia o andando otros caminos con
plenas libertades, justicia social y económica. De eso se trata.
domingo, 26 de octubre de 2014
Ética y política
Por ANULFO
MATEO PÉREZ
I
Hoy más que nunca se hace necesaria analizar ética y política en la República Dominicana, sobre todo cuando las clases dominantes y sus representantes en la sociedad burguesa han separado los mismos en una praxis tan cotidiana, que han hecho de ello una regla en la conducción del Estado.
I
Hoy más que nunca se hace necesaria analizar ética y política en la República Dominicana, sobre todo cuando las clases dominantes y sus representantes en la sociedad burguesa han separado los mismos en una praxis tan cotidiana, que han hecho de ello una regla en la conducción del Estado.
El
tema preocupa desde tiempos remotos, cuando Nicolás Maquiavelo, entre el siglo
XV y XVI, profundizó en el análisis de los principados en una Italia
desarticulada. Esta realidad es descrita en su obra cumbre, El Príncipe.
En
ella contrapone la ética a la política, muy a pesar de que en la actualidad sus
defensores a ultranza lo consideran el mejor exponente y prístino de la
mentalidad más avanzada de su época.
La
comparación entre maquiavelismo y marxismo lleva a pensar en uno de los asuntos
más importantes de nuestros tiempos, el de la relación entre política y delito
de Estado.
En
momentos de crisis y “resquebrajamiento moral”, como ocurre en la actualidad en
nuestro país, quienes detentan el Poder sienten una gran atracción por el
“comunitarismo” tradicional de la mafia.
Y
en ese ámbito de corrupción en esta pseudo-democracia, tratan las infracciones
a la ley como se tratan los asuntos domésticos en el seno de la familia, donde
la ética y la política no son términos contrapuestos ni excluyentes.
Pero
partiendo de realidades donde la ética y la política no son términos
contrapuestos ni excluyentes, sino pilares de la conducta humana emancipadora,
se debe distinguir entre “hermandad mafiosa” y “fraternidad política”.
Vistos
los conceptos desde este ángulo crítico, la asunción indisoluble de los dos
primeros términos viene a convertirse en una prolongación de la concepción
antigua, clásica, de ellos. De la concepción griega, aristotélica.
IILa doble moral en la cultura burguesa es expresión directa de quienes intervienen en la política careciendo de un marco conceptual ético. Partiendo de esa premisa, podemos entender la conducta política de quienes expresan su vocación democrática cercenando los derechos del pueblo.
Así, expresan su lucha contra la pobreza y la asunción de ideales moralizadores, de soberanía e independencia, mientras reivindican históricamente a los sustentadores de regímenes nefastos como el de Trujillo.
De modo que la parafernalia montada en cierta ocasión en el Palacio Nacional por Leonel Fernández para celebrar el centenario del nacimiento de Joaquín Balaguer, no sólo debe valorarse como oportunismo o “habilidad” política.
Esa conducta debe entenderse como una práctica “neomaquiaveliana”, que separa lo ético de la política. El alborozo en la sede de gobierno peledeista lo sustentaron aceptando como válida la vida y obra de Balaguer.
El cortesano de la era de Trujillo, ensalzado en el Palacio Nacional, se apartó de toda ética para satisfacer su necesidad psicológico-existencial, cuya adicción al poder fue consustancial a su personalidad.
Pero también fue vinculante a su pensamiento político-económico-social, inconmovible a los requerimientos de cambios y ruptura del estatus quo, representado por él y la clase social gobernante a quien le servía.
Para nuestro país ha sido traumática la incidencia política y dirección del Estado dominicano por los alumnos “más aventajados” del profesor Juan Bosch. Y frustratorios los esfuerzos intelectuales de él.
De nada sirvió que el autor de La Mañosa se esforzara para darle contenido “ético” al accionar del PLD. Su labor ha terminado pulverizándose, y en su huerto las “auyamas han parido calabazas”.
domingo, 12 de octubre de 2014
Las 11 víctimas del Robert Reid
No son once los niños fallecidos por atenciones inadecuadas en el Hospital
Robert Reid Cabral de esta capital, sino miles los que han expirado en ese y
otros centros estatales, cuyas verdaderas causas están en el modelo de salud y
el bajo presupuesto que dedica el gobierno para asistir a la población.
Frente al escándalo, se buscan “chivos expiatorios” para salvar la “reputación” del gobierno, conformando una comisión interdisciplinaria que ha cargado el dado contra los médicos y la dirección hospitalaria.
Así, el criminal sistema de salud ni el gobierno irán al “banquillo de los acusados”, este se lavará las manos, el presidente Danilo Medina saldrá del “shock” y continuará un insuficiente presupuesto para salud.
Se pretende defender el desorden institucional en el Ministerio de Salud Pública, donde la auditoria médica y supervisión, entre otras acciones contenidas en los reglamentos, nunca se han puesto en práctica.
Si el presidente Danilo Medina ha elevado el grito al cielo y ha sido diligente para ordenar que se investiguen las muertes de los 11 niños, es porque los programas infantiles tienen supervisión internacional.
Por eso, no se hizo esperar la exigencia de la representante del Fondo de Infancia para las Naciones Unidas (Unicef), María Jesús Conde, para que el asunto sea investigado exhaustivamente.
Por el miedo al “cuco” de Unicef, las muertes intrahospitalarias en el ámbito materno-infantil causan cierto “alboroto”, pero todo continúa igual, tratándose de fallas del sistema de salud impuesto por el Estado.
El sistema no es sólo inoperante, sino que adolece de múltiples y groseras fallas en su aplicación, por ineficiencia, corrupción y politiquería. Ahora, a echar la “cuaba” a “chivos expiatorios”… y ¡“san se acabó”!
Frente al escándalo, se buscan “chivos expiatorios” para salvar la “reputación” del gobierno, conformando una comisión interdisciplinaria que ha cargado el dado contra los médicos y la dirección hospitalaria.
Así, el criminal sistema de salud ni el gobierno irán al “banquillo de los acusados”, este se lavará las manos, el presidente Danilo Medina saldrá del “shock” y continuará un insuficiente presupuesto para salud.
Se pretende defender el desorden institucional en el Ministerio de Salud Pública, donde la auditoria médica y supervisión, entre otras acciones contenidas en los reglamentos, nunca se han puesto en práctica.
Si el presidente Danilo Medina ha elevado el grito al cielo y ha sido diligente para ordenar que se investiguen las muertes de los 11 niños, es porque los programas infantiles tienen supervisión internacional.
Por eso, no se hizo esperar la exigencia de la representante del Fondo de Infancia para las Naciones Unidas (Unicef), María Jesús Conde, para que el asunto sea investigado exhaustivamente.
Por el miedo al “cuco” de Unicef, las muertes intrahospitalarias en el ámbito materno-infantil causan cierto “alboroto”, pero todo continúa igual, tratándose de fallas del sistema de salud impuesto por el Estado.
El sistema no es sólo inoperante, sino que adolece de múltiples y groseras fallas en su aplicación, por ineficiencia, corrupción y politiquería. Ahora, a echar la “cuaba” a “chivos expiatorios”… y ¡“san se acabó”!
martes, 7 de octubre de 2014
Jamás podrán intimidarme
El
pasado martes 23 de septiembre, a las 9:15 de la noche, mi casa fue atacada a
pedradas y dos grandes ventanales fueron destruidos, creando alarma en mi
familia. La indignación del vecindario se dejó sentir y la solidaridad llegó a
un punto que algunos se presentaron dispuestos a repeler la agresión.
Esta
es la quinta vez en los últimos seis años que mi familia es agredida y los
mismos ventanales son destruidos. No había revelado públicamente cada caso,
para que mi anciana madre no se enterara.
He
interpuesto las respectivas denuncias en la Policía y la Fiscalía. Hasta ahora,
nada se sabe. En cambio, hackers al servicio del Gobierno han seguido saboteando
el diario digital www.Barrigaverde.net, que dirijo desde hace 10 años.
De
igual forma han robado la data de mi PC, cargándola a un archivo “Y”, procediendo
luego a borrarla. Mi teléfono residencial ha sido intervenido, como es usual
con otros ciudadanos “bajo toda sospecha”.
Hace
unos dos años, recibí en mi casa la simpática visita de oficiales de la DNI, del
SS de la Policía
y de sus técnicos en informática, quienes buscaron en mi PC rastros de “hechos
terroristas”.
Las
pedreas se iniciaron el domingo en que Leonel Fernández le “ganó” la convención
a Danilo Medina en el PLD, el mismo día en que esta columna había advertido el
uso de los recursos del Estado para aplastarlo.
A
las 7:25 de la noche de ese mismo domingo, mi residencia era atacada desde la
calle lateral. Ahora, círculos de poder escriben un guión, de que las agresiones
provienen de uno de mis pacientes mentales.
No
obstante, tres meses atrás, dos sujetos fueron detenidos y liberados por la Policía. Lo se, quienes me
hostigan tienen capacidad para atentar contra mi vida, pero jamás podrán intimidarme.
Jamás.
domingo, 21 de septiembre de 2014
Los de carácter envilecido
Por ANULFO MATEO PÉREZ
Analizando la conducta de ciertos intelectuales, o que presumen serlo, debe uno remontarse al 13 de febrero de 1936, cuando Américo Lugo le “enmendó la plana” a Trujillo. Lugo no pensó nunca que el envilecimiento de muchos de sus coterráneos, más de seis décadas después tendría en otros sus relevos, cuando el neotrujillismo fuera una realidad.
En su epístola dirigida al dictador, Lugo decía: “La excelsitud no se improvisa (…). “La actual generación dominicana es precisamente, en mi pobre concepto, la más desgraciada…”.
Lo atribuía a la Ocupación Americana de 1916, “que fue escuela de cobardía y envilecimiento, debilidad y corrupción, y cuya acción depresiva y deletérea destruyó la energía del carácter…”.
Lamentaba que se había perdido la seriedad de la palabra, la vergüenza en el obrar, dejando a un “pueblo muelle” despreocupado y descreído sobre esta “tierra de acción y de fe”.
Decía José Martí, que cuando hay muchos hombres sin decoro hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres.
Por eso Lugo llamó príncipe de la libertad a Francisco del Rosario Sánchez y reconoció a Meriño frente a Santana, a Luperón frente a España y a Emiliano Tejera frente a Báez.
A los lisonjeros de hoy, los mismos que hacen fila en el Palacio Nacional para saludar al presidente, les dejó este ejemplo de dignidad contenido en la siguiente frase dirigida a Trujillo.
“…que nadie pueda erróneamente figurarse que pertenezco a la farándula que sigue a Ud. como sigue a todos los potentados de la tierra, tratando de medrar a cambio de lisonjas”.
Al igual que Aristóteles, que entendía que “un montón de gente no es una república”, Américo Lugo decía tener la creencia, “cada vez más arraigada, de que el pueblo dominicano no constituye nación”.
Analizando la conducta de ciertos intelectuales, o que presumen serlo, debe uno remontarse al 13 de febrero de 1936, cuando Américo Lugo le “enmendó la plana” a Trujillo. Lugo no pensó nunca que el envilecimiento de muchos de sus coterráneos, más de seis décadas después tendría en otros sus relevos, cuando el neotrujillismo fuera una realidad.
En su epístola dirigida al dictador, Lugo decía: “La excelsitud no se improvisa (…). “La actual generación dominicana es precisamente, en mi pobre concepto, la más desgraciada…”.
Lo atribuía a la Ocupación Americana de 1916, “que fue escuela de cobardía y envilecimiento, debilidad y corrupción, y cuya acción depresiva y deletérea destruyó la energía del carácter…”.
Lamentaba que se había perdido la seriedad de la palabra, la vergüenza en el obrar, dejando a un “pueblo muelle” despreocupado y descreído sobre esta “tierra de acción y de fe”.
Decía José Martí, que cuando hay muchos hombres sin decoro hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres.
Por eso Lugo llamó príncipe de la libertad a Francisco del Rosario Sánchez y reconoció a Meriño frente a Santana, a Luperón frente a España y a Emiliano Tejera frente a Báez.
A los lisonjeros de hoy, los mismos que hacen fila en el Palacio Nacional para saludar al presidente, les dejó este ejemplo de dignidad contenido en la siguiente frase dirigida a Trujillo.
“…que nadie pueda erróneamente figurarse que pertenezco a la farándula que sigue a Ud. como sigue a todos los potentados de la tierra, tratando de medrar a cambio de lisonjas”.
Al igual que Aristóteles, que entendía que “un montón de gente no es una república”, Américo Lugo decía tener la creencia, “cada vez más arraigada, de que el pueblo dominicano no constituye nación”.
domingo, 14 de septiembre de 2014
Gobernadores de colonia
Por ANULFO MATEO PÉREZ
I
La “fiebre del oro” es conocida como el período de migración apresurada y de forma masiva hacia California, EEUU, de personas que vivían en duras condiciones socio-económicas; pequeños granjeros,rufianes y aventureros que soñaban con hacerse ricos con el hallazgo de una veta del valioso metal.
El fenómeno se produjo en el año 1849, al coincidir en el tiempo las mejoras en los medios de comunicación (periódicos y transporte), que llevaban noticias y rumores sobre el negocio de ese apreciado recurso.
Por supuesto, la lucha por encontrar el reluciente mental venía de la insatisfacción social y económica de una parte de la población, y porque el sistema monetario internacional se había basado en el patrón oro.
En 1849 y años sucesivos, muy pocos mineros se hicieron ricos en EEUU, mientras que los comerciantes de esa mercancía hicieron fortuna. La “fiebre del oro” la vienen padeciendo desde entonces las transnacionales de ese sector.
Ya no son “mineros harapientos” los que padecen “hipertermia” por el oro, sino grupos económicos multinacionales insaciables, que usan su poder contra la soberanía de los pueblos para saquearlos.
En otras palabras, “gánsteres económicos”, como les llama John Perkins en su obra “Historia secreta del imperio americano”, capaces de amedrentar o matar presidentes de repúblicas bananeras a su merced.
La observación de la ley que declaraba a Loma Miranda parque nacional, es parte de esa historia, donde se ha expresado desde el chantaje, hasta veladas amenazas de Falconbridge.
La desgracia de nuestro país es que los presidentes son en realidad gobernadores de colonia, incapaces de resistir las presiones del poder político, económico y militar de esos enclaves y sus socios locales de pacotilla.
II
Cuando el PLD y sus más altos dirigentes, entre ellos Leonel Fernández y Danilo Medina, decidieron formar el mal llamado Frente Patriótico Nacional, con el pedimento a Joaquín Balaguer para que este les respaldara en su propósito de alcanzar el poder, sellaban un compromiso con todo lo que él representaba.
El partido fundado por Juan Bosch y sus nuevos líderes serían el relevo político al servicio de la clase dominante y lacayos bajo el mando de Washington, como se aprecia en los cables dados a conocer por Wikileaks.
En entrevista al diario madrileño El País, en julio de 2004, Leonel Fernández afirmó que estamos “en el patio trasero de EE UU” y que por lo tanto “no podemos enfrentarnos a ellos”, como diría cualquier gobernador de colonia.
La observación de la ley que convierte a Loma Miranda en Parque Nacional, es el resultado de esa realidad. Medina y Fernández, así como sus legisladores responden a los intereses de Falconbridge.
Para revertir la funesta decisión tomada por el presidente Danilo Medina sólo es posible con la movilización del pueblo dominicano, como en efecto está sucediendo ya en distintos puntos del país.
La firmeza en la exigencia para que Loma miranda sea preservada se pretende amedrentar con tropas del Ejército y la Policía, tal como hacía el cortesano de la era de Trujillo Joaquín Balaguer.
No obstante, las luchas en defensa de Loma Miranda apuntan a incrementarse hasta convertir ese pulmón ecológico en Parque Nacional. Y con represión tipo GESTAPO no podrá ser frenada.
Recordando a John Perkins, los presidentes de repúblicas bananeras siempre están presionados por un dilema frente a las transnacionales: O aceptan “la zanahoria de la corrupción”, o se exponen “al golpe de Estado o del asesinato.”
domingo, 31 de agosto de 2014
Sicarios de la palabra
Por ANULFO MATEO PÉREZ
El polaco Ryszard Kapuscinski, maestro del periodismo, tenía toda la razón al afirmar que desde el momento en descubrirse que la información era un negocio, la verdad dejó de ser importante. Hoy, de ese vil comercio viven como reyes los que venden su pluma o su voz a los poderosos en nuestro país.
Estamos viviendo la amarga realidad de que sicarios al servicio del poder político, económico y del funcionariado aniquilan con la palabra a sus blancos designados y desvirtúan los hechos para confundir.
Esos “analistas políticos” están organizados en red nacional y tienen un centro de mando con una agenda diaria, copando una buena parte de los medios de comunicación para condicionar la psiquis de sus receptores.
El gobierno de Danilo Medina, como lo hizo su predecesor, invierte sumas millonarias del erario para pagar a esos hacedores de la mentira, que por demás han jugado siempre el papel de mercenarios políticos.
Así, los distintos poderes del Estado tienen sus propias redes. El Ejecutivo la organiza a través de los ministerios y cuenta con bases de operaciones en ciertos medios de comunicación, donde fungen como “analistas”.
Es un eficiente poder mediático al servicio del Gobierno, inmensamente mayor a los que realizan un ejercicio libre e independiente. Goza de la ubicuidad. Es omnipresente, al estar en todas partes a la vez.
Esa batería oficial de “periodistas” centrará su fuego contra el frente opositor en gestación, que será el principal blanco de sus ataques en lo que vislumbro como una candente guerra de la palabra.
Opositores se quejan de que “comunicadores” tergiversan sus opiniones, ponen en su boca frases que nunca han pronunciado y siembran la cizaña en sus organizaciones. ¿Asombrados? Para eso les pagan.
El polaco Ryszard Kapuscinski, maestro del periodismo, tenía toda la razón al afirmar que desde el momento en descubrirse que la información era un negocio, la verdad dejó de ser importante. Hoy, de ese vil comercio viven como reyes los que venden su pluma o su voz a los poderosos en nuestro país.
Estamos viviendo la amarga realidad de que sicarios al servicio del poder político, económico y del funcionariado aniquilan con la palabra a sus blancos designados y desvirtúan los hechos para confundir.
Esos “analistas políticos” están organizados en red nacional y tienen un centro de mando con una agenda diaria, copando una buena parte de los medios de comunicación para condicionar la psiquis de sus receptores.
El gobierno de Danilo Medina, como lo hizo su predecesor, invierte sumas millonarias del erario para pagar a esos hacedores de la mentira, que por demás han jugado siempre el papel de mercenarios políticos.
Así, los distintos poderes del Estado tienen sus propias redes. El Ejecutivo la organiza a través de los ministerios y cuenta con bases de operaciones en ciertos medios de comunicación, donde fungen como “analistas”.
Es un eficiente poder mediático al servicio del Gobierno, inmensamente mayor a los que realizan un ejercicio libre e independiente. Goza de la ubicuidad. Es omnipresente, al estar en todas partes a la vez.
Esa batería oficial de “periodistas” centrará su fuego contra el frente opositor en gestación, que será el principal blanco de sus ataques en lo que vislumbro como una candente guerra de la palabra.
Opositores se quejan de que “comunicadores” tergiversan sus opiniones, ponen en su boca frases que nunca han pronunciado y siembran la cizaña en sus organizaciones. ¿Asombrados? Para eso les pagan.
domingo, 24 de agosto de 2014
Lo esperado, no sorprende
Por ANULFO MATEO PÉREZ
El ejercicio gubernamental que ha encabezado Danilo Medina durante estos últimos dos años, la primera mitad de su período constitucional, no debe sorprender a quienes conocen de los fundamentos económicos, políticos e ideológicos de una corporación llamada Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Los tres períodos de gobiernos anteriores, bajo la batuta de Leonel Fernández, y los dos años que ha presidido Danilo Medina, tienen el mismo hilo conductor, pese a los contrastes de sus estilos personales.
Los fundamentos de sus políticas, desde 1996, lo constituyen un “arroz con mango” del mal llamado Consenso de Washington, algunas de sus prescripciones aplicadas con mucha corrupción y clientelismo político.
La receta del economista John Williamson precipitó la crisis en América Latina, donde se aplicó, y aquí, con las características descritas, viene azotando como huracán categoría cinco en la escala Saffir-Simpson.
Las medidas neoliberales asumidas por el PLD, que por sí solas son devastadoras para las capas medias y los más pobres, han hecho estragos en la economía dominicana, caracterizada por grandes déficits fiscales.
Se han olvidado de la educación y la salud, limitándose ha construcción y reconstrucción de infraestructuras, sin mejorar la calidad de las mismas ni elevar los salarios del personal de ambos sectores.
Emprenden reformas tributarias, cargando el mayor peso a las capas medias y a los más empobrecidos de la sociedad, para elevar unas recaudaciones que terminan en los bolsillos de funcionarios y abultadas nóminas oficiales,
Además la privatización de las empresas estatales; entrega de nuestros recursos a transnacionales y depredación del medio ambiente.
El PLD no debe seguir al frente de un país saqueado y moralmente destruido.
El ejercicio gubernamental que ha encabezado Danilo Medina durante estos últimos dos años, la primera mitad de su período constitucional, no debe sorprender a quienes conocen de los fundamentos económicos, políticos e ideológicos de una corporación llamada Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Los tres períodos de gobiernos anteriores, bajo la batuta de Leonel Fernández, y los dos años que ha presidido Danilo Medina, tienen el mismo hilo conductor, pese a los contrastes de sus estilos personales.
Los fundamentos de sus políticas, desde 1996, lo constituyen un “arroz con mango” del mal llamado Consenso de Washington, algunas de sus prescripciones aplicadas con mucha corrupción y clientelismo político.
La receta del economista John Williamson precipitó la crisis en América Latina, donde se aplicó, y aquí, con las características descritas, viene azotando como huracán categoría cinco en la escala Saffir-Simpson.
Las medidas neoliberales asumidas por el PLD, que por sí solas son devastadoras para las capas medias y los más pobres, han hecho estragos en la economía dominicana, caracterizada por grandes déficits fiscales.
Se han olvidado de la educación y la salud, limitándose ha construcción y reconstrucción de infraestructuras, sin mejorar la calidad de las mismas ni elevar los salarios del personal de ambos sectores.
Emprenden reformas tributarias, cargando el mayor peso a las capas medias y a los más empobrecidos de la sociedad, para elevar unas recaudaciones que terminan en los bolsillos de funcionarios y abultadas nóminas oficiales,
Además la privatización de las empresas estatales; entrega de nuestros recursos a transnacionales y depredación del medio ambiente.
El PLD no debe seguir al frente de un país saqueado y moralmente destruido.
2016: ¿Matadero electoral?
Por ANULFO MATEO PÉREZ
De no conformarse un robusto movimiento nacional para enfrentar al peledeismo gobernante, las elecciones generales de 2016 podrían constituir un valladar para las organizaciones políticas que aspiran a llegar al poder a través de ese proceso comicial, por demás bastante desacreditado.
Sería, como hemos dicho en otras ocasiones, un matadero electoral; un medio para legitimar en el poder una vez más al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien controla a su favor la JCE y las altas cortes.
Para evitarlo, los opositores tendrían que arriar las banderas del sectarismo y prejuicio a ultranza, de la discriminación e intolerancia, y por lo contrario, izar la bandera de la ecuanimidad política.
Dejar atrás ciertos pruritos, que justifican el aislamiento y el concepto de capilla de esas organizaciones, y conformar un frente, ya que por separado no harían ni un sólo rasguño al continuismo morado.
Ese frente opositor de amplia unidad es posible, si la tolerancia es asumida, pese a las diferencias políticas e ideológicas. De no ser así, el oficialismo ganaría en 2016 y fortalecería su dictadura institucional.
No hablo de conciliación de clases, algo absurdo en cualquier escenario, sino de la unidad táctica para desplazar al PLD del poder, para la conformación de un gobierno que permita al menos cierta equidad política.
Si ese frente opositor enarbola un programa mínimo, con las demandas más sentidas de los sectores populares, se convertiría en una fuerza electoral imparable, arrolladora, un verdadero tsunami social.
Tendría la fuerza para cambiar la JCE y las altas cortes peledeistas; frenaría el uso y abuso de los recursos del Estado en las elecciones; se crearía una nueva correlación de fuerzas en los comicios del 2016.
De no conformarse un robusto movimiento nacional para enfrentar al peledeismo gobernante, las elecciones generales de 2016 podrían constituir un valladar para las organizaciones políticas que aspiran a llegar al poder a través de ese proceso comicial, por demás bastante desacreditado.
Sería, como hemos dicho en otras ocasiones, un matadero electoral; un medio para legitimar en el poder una vez más al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien controla a su favor la JCE y las altas cortes.
Para evitarlo, los opositores tendrían que arriar las banderas del sectarismo y prejuicio a ultranza, de la discriminación e intolerancia, y por lo contrario, izar la bandera de la ecuanimidad política.
Dejar atrás ciertos pruritos, que justifican el aislamiento y el concepto de capilla de esas organizaciones, y conformar un frente, ya que por separado no harían ni un sólo rasguño al continuismo morado.
Ese frente opositor de amplia unidad es posible, si la tolerancia es asumida, pese a las diferencias políticas e ideológicas. De no ser así, el oficialismo ganaría en 2016 y fortalecería su dictadura institucional.
No hablo de conciliación de clases, algo absurdo en cualquier escenario, sino de la unidad táctica para desplazar al PLD del poder, para la conformación de un gobierno que permita al menos cierta equidad política.
Si ese frente opositor enarbola un programa mínimo, con las demandas más sentidas de los sectores populares, se convertiría en una fuerza electoral imparable, arrolladora, un verdadero tsunami social.
Tendría la fuerza para cambiar la JCE y las altas cortes peledeistas; frenaría el uso y abuso de los recursos del Estado en las elecciones; se crearía una nueva correlación de fuerzas en los comicios del 2016.
sábado, 2 de agosto de 2014
Divide y vencerás
Por ANULFO MATEO PÉREZ
I
Esa
concepción militar o política es usada para debilitar a los adversarios, que
unidos pueden destronar a quienes gobiernan contra la voluntad de las mayorías,
como ocurría en la antigüedad y a todo lo largo de la historia.
Se
trata de un recurso político para mantener bajo control a la población,
dividiendo y fragmentando el poder de las distintas organizaciones o grupos
existentes e impidiendo su unidad por un objetivo común.
Para
dominar a sus adversarios en la
India, los imperialistas franceses como los británicos,
utilizaron las tácticas de enemistar a las diferentes regiones y a sus líderes
usando marginalmente
sus ejércitos.
Los
que usurpan el poder, luchan para evitar la unidad y entendimiento entre sus contendores.
El poder central estimula la división y crea disensiones y desconfianzas entre
sus opositores.
Para
ello, el que está en el poder alimenta disputas y controversias entre la franja
política que le adversa, para dificultar las alianzas o coaliciones entre ellos
e impedir que se fortalezcan y le desplacen del gobierno.
Sun
Tzu explicaba que lo supremo en el arte de la guerra consiste en someter al
enemigo sin darle batalla, fragmentándolos para evitar cohesiones que se puedan
convertir en una “amenaza peligrosa”.
En
nuestro país sobran ejemplos. La cúpula del PLD aplica esos procedimientos
políticos contra sus opositores, para poder mantenerse en el gobierno sin el
respaldo de la mayoría del pueblo dominicano.
II
El punto más importante en la agenda de un gran Frente Político Opositor es sacar del gobierno al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y a sus aliados, que se proponen eternizarse en el poder mediante el uso abusivo de los recursos del Estado, con el que vienen fusionándose desde el 2004.
De modo, que enfrentar al PLD es confrontar al Estado, y para derrotarlo es indispensable una amplia unidad opositora, que fundamente su accionar en un programa mínimo de gobierno que cohesione a sus integrantes.
Es una insensatez, que la oposición se proponga de forma separada enfrentar un partido que lleva casi cuatro períodos, tres de ellos consecutivos, aferrado al poder y amalgamado al Estado dominicano.
Si las izquierdas se mantienen dispersas y de igual forma marcha la oposición liberal, prescindiendo de la más amplia unidad, con Leonel Fernández o sin él como candidato, el PLD retendría el poder en 2016.
Para los peledeistas es crucial mantener el poder, porque de no hacerlo se expondrían al “tsunami social” de que se les haga justicia por los 16 años de gobiernos marcados por la corrupción y abusos de poder.
La tendencia a la dispersión de los sectores liberales y de izquierda será estimulada por el gobierno, el PLD y los órganos del Estado, para mantenerlos divididos y vencerles en las elecciones de 2016.
De tal manera, que PLD-gobierno-Estado harán todo lo posible para impedir la conformación de la más amplia unidad opositora. Y para ello usarán todos los recursos que tienen a mano, que son variados y poderosos.
Sería infantil que los opositores pretendan enfrentar por separado a un partido oficialista carente de escrúpulo. Y es algo más que lastimoso que se le haga el juego en su labor de dividir a sus adversarios.
II
El punto más importante en la agenda de un gran Frente Político Opositor es sacar del gobierno al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y a sus aliados, que se proponen eternizarse en el poder mediante el uso abusivo de los recursos del Estado, con el que vienen fusionándose desde el 2004.
De modo, que enfrentar al PLD es confrontar al Estado, y para derrotarlo es indispensable una amplia unidad opositora, que fundamente su accionar en un programa mínimo de gobierno que cohesione a sus integrantes.
Es una insensatez, que la oposición se proponga de forma separada enfrentar un partido que lleva casi cuatro períodos, tres de ellos consecutivos, aferrado al poder y amalgamado al Estado dominicano.
Si las izquierdas se mantienen dispersas y de igual forma marcha la oposición liberal, prescindiendo de la más amplia unidad, con Leonel Fernández o sin él como candidato, el PLD retendría el poder en 2016.
Para los peledeistas es crucial mantener el poder, porque de no hacerlo se expondrían al “tsunami social” de que se les haga justicia por los 16 años de gobiernos marcados por la corrupción y abusos de poder.
La tendencia a la dispersión de los sectores liberales y de izquierda será estimulada por el gobierno, el PLD y los órganos del Estado, para mantenerlos divididos y vencerles en las elecciones de 2016.
De tal manera, que PLD-gobierno-Estado harán todo lo posible para impedir la conformación de la más amplia unidad opositora. Y para ello usarán todos los recursos que tienen a mano, que son variados y poderosos.
Sería infantil que los opositores pretendan enfrentar por separado a un partido oficialista carente de escrúpulo. Y es algo más que lastimoso que se le haga el juego en su labor de dividir a sus adversarios.
sábado, 19 de julio de 2014
¿Confundiendo fusión con alianza?
Por ANULFO
MATEO PÉREZ
El
momento es clave para distinguir entre alianza y fusión de las fuerzas
políticas. La fusión de dos o más fuerzas significa construir una nueva
estructura, cuya unidad obliga a la desaparición de las entidades que le
precedieron, es decir, pierden su independencia y pasan a formar parte de un
todo único.
La
fusión entre organizaciones sólo es posible cuando han desaparecido sus
contradicciones tácticas y estratégicas, que impedían constituir un solo
instrumento orgánico en el orden político, ideológico y de clases.
Muy
distinta a la fusión es la alianza entre organizaciones que llevan en sí
contradicciones ideológicas e intereses de clases. Las coincidencias tácticas
son el motor que impulsa a la unidad de ellas.
Se
trata de unidad temporal entre grupos o clases sociales para llevar a cabo una
lucha por intereses comunes, pero como se trata de unión de grupos o clases
diferentes, la unidad podría ser hasta un tramo de la lucha.
La
alianza puede ser a corto, mediano o largo plazo. El tiempo de ella lo dirán
las condiciones sociales y políticas en el marco de la dinámica entre las
contradicciones de clases e intereses a defender.
Esas
contradicciones se pueden superar produciéndose entonces la fusión o se pueden
agudizar, provocando la separación o ruptura de la alianza. Lo importante es el
programa que los une entre sí.
En
estos momentos, la izquierda debe valorar si existen coincidencias importantes
entre los opositores al engendro creado por la extrema derecha y pseudo
liberales, llamado “dictadura institucional”.
Lo
más avanzado de la sociedad debe abrirse a una gran alianza contra el bloque
integrado por el peledeismo gobernante neobalaguerizado y las transnacionales
que depredan y se proponen engullirse todo el país.
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