Raíces Radio

domingo, 16 de marzo de 2014

Para cortar las alas


Por ANULFO MATEO PÉREZ

En franca violación al derecho internacional el gobierno de Estados Unidos acaba de aplicar en la República Dominicana la extraterritorialidad de sus leyes, para impedir que las aeronaves de Cubana de Aviación se abastezcan de combustible en el Aeropuerto Internacional de las Américas (AILA).

Esa draconiana medida no es sólo parte del bloqueo económico de los halcones de Washington contra Cuba Revolucionaria, sino una grosera violación a la Constitución, las leyes y soberanía de nuestro país.

A los miembros de la misión diplomática cubana se les ha impedido realizar transacciones comerciales en el Scotiabank, como acceder al supermercado Pricesmart, ante la indiferencia del gobierno dominicano.

El pecado de Cuba ha sido hacer valer, luego del triunfo de la Revolución, la equidad, inclusión, su condición de nación libre, independiente y soberana; ejercer su autodeterminación.

Estas violaciones al derecho internacional entran en abierto desafío a las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que por amplia mayoría de sus miembros se oponen al bloqueo contra la Isla.

El imperio se muestra sordo a esos justos reclamos, porque su obsesión es impedir el desarrollo de un proceso de transformación política, social y económica anticapitalista. En pocas palabras, cortar sus alas.

El 6 de octubre de 1976, un avión de Cubana de Aviación fue derribado por un sabotaje con C-4, urdido por la CIA y ejecutado por su agente Luis Posada Carriles, cuando partía de la isla de Barbados con 73 personas a bordo.

Pese a todo, Cuba es como otros pueblos de América, imbatible, indomable,  como lo son las poesías del alma, que como decía José Martí, “nadie podrá cortar las alas…”, ni impedir “esa mirada ansiosa hacia las nubes”.