Raíces Radio

miércoles, 12 de marzo de 2014

Conspiración del silencio

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Una extraña enfermedad ha sido detectada en humanos, y las autoridades la han asumido como secreto de Estado, por afectar a un encumbrado grupo social. 

El padecimiento entraña daño en la fonación y la audición. También provoca insomnio, temblores, sudoración, angustia, vértigos, disfemia, mejor conocida como tartamudez, y rigidez de los músculos del cuello.

El contagio se produjo luego del arribo al país de un empresario español, constructor de torres, que es mantenido en cuarentena en Valencia, España, donde le detectaron un polvo blanco, causante del mal tropical.

Un Duque colombiano que dio la mano al español, está interno en esta capital, bajo las atenciones del doctor Vargas, pero otros doctores han amenazado con darle el alta.

El científico español Javier Saragoza, investiga el brote y un picazo mal conceptualizado. Nadie coopera; se lo impide la sordomudez. Ni responden al lenguaje de señas: dicen que la rigidez les impide asentir o negar con la cabeza. 

El investigador ibérico trató de auxiliarse del epidemiólogo inglés, John Snow, pero luego se enteró que éste yace bajo una lápida en Londres, desde el 16 de junio de 1858. 

Por tales razones, Saragoza advierte que se llevará a los contagiados a España, para una investigación más exhaustiva, noticia que paradójicamente ha empeorado el estado de los afectados. 

El doctor Castillo, gurú en toxicología, asegura que el causante es un veneno —como el que emana de la Barrick Gold— y de forma “ominosa” permea los cuerpos armados y desalmados del país.

Habrá que esperar al Tiempo, quien tiene la última palabra, aislar el agente causal, detectar a todos los contaminados, aplicarles el antídoto y mantenerlos en cuarentena entre 10 y 30 años, según el caso.

Los pactos de las derechas

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Cuando en el año 1985, el centro derechista Partido Revolucionario Social Cristiano (PRSC) decidió sumarse al Partido Reformista (PR) y asumir el liderazgo de Joaquín Balaguer, pasándole su “Social Cristiano” y su sigla para crearle así una “nueva imagen” al neotrujillismo, ya se sabía de antemano.

En 1966, el socialcristianismo enarboló la consigna “vota verde por Juan Bosch”, fruto de un pacto con el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que buscaba restablecerlo en el poder, luego de ser derrocado el 25 de septiembre de 1963 por la oligarquía y Estados Unidos.

Casi cuarenta años después el PRD firma el “pacto por la democracia” con Balaguer, para evitar la ruptura con el sistema político y preservar el status quo.

El PRD, organización fundada en Cuba en 1939 con el propósito de luchar contra la dictadura de Trujillo, su derrocamiento y la tomar del poder político, desde su arribo al país se enfrentó a la oligarquía desde una posición liberal.

Al regresar del exilio, el 20 de octubre de 1961, el profesor Juan Bosch acuñó los términos “tutumpotes” e “hijos de Machepas”, para caracterizar a ricos y pobres, respectivamente. Luego escribe las obras De Cristóbal Colón a Fidel Castro; El Caribe, Frontera Imperial y Composición Social Dominicana, entre otras.

Pese a esa labor, el PRD continuaba desplazándose más hacia la derecha. El profesor Juan Bosch decide marcharse y fundar el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), sustentado en la pequeña burguesía -profesionales, intelectuales y segmentos del movimiento sindical que habían desertado de la izquierda- para arribar a la presidencia de la República.

Esa organización, fundada por Bosch, que hablaba de revolución, liberación y de prédica antibalaguerista, al transcurrir el tiempo se ha reencontrado ideológicamente con sus antiguos compañeros de partido y las demás organizaciones del anacrónico sistema político imperante, sometido a crisis políticas y luchas intestinas, corroído por la corrupción desde el poder, reciclándose constantemente para sobrevivir.

Todo esto estaba precedido de una febril lucha ideológica en la pequeña burguesía, lo que llevó a la fractura del Movimiento Revolucionario 14 de Junio y de las organizaciones obreras y sociales afines, enfrentadas entre sí fruto de los devaneos del vanguardismo sectario.

Las izquierdas, sometidas a crisis periódicas, se han dispersado -sobre todo luego de la caída del “socialismo real”- y a pesar de los esfuerzos de reunificación, sus escasos fundamentos político-ideológicos las mantienen postradas, cuando en centro y Suramérica desplazan a las derechas.

Ese paso no ha sido posible en el país, por los errores políticos de sus dirigentes, las acciones diestras de sus enemigos, la represión y el crimen político de que han sido víctimas, primero por Trujillo y luego por los gobiernos despóticos al servicio de la oligarquía bajo las políticas de exterminio de Estados Unidos.

Una pléyade de revolucionarios fue eliminada combatiendo a Trujillo, durante las expediciones de Luperón, el 19 de julio de 1949, y de Constanza, Maimón y Estero Hondo, el 14 de Junio de 1959. Dos grandes líderes fueron asesinados: Manuel Aurelio Tavárez Justo, el 16 de diciembre de 1963, y Francisco Alberto Caamaño Deñó, el 16 de febrero de 1973.

Los pactos entre peledeísmo, perredeísmo y reformismo, -sumados al transfuguismo- son una reedición de la historia, para que todo quede igual. La partidocracia en la que se anida la burguesía y la pequeña burguesía trepadora, han entronizado la corrupción y los abusos de poder, en un marco legal donde prevalece la impunidad en contra del pueblo dominicano.

martes, 11 de marzo de 2014

Las cosas de Yaque


Por ANULFO MATEO PÉREZ

Cuando cursaba el bachillerato recibí de mi profesor de Literatura los mayores estímulos para seguir leyendo y emborronando cuartillas sobre temas diversos, que luego guardaba en un maletín.

Rafael Herrera Suazo (Yaque), profesor, poeta, escritor refinado, era además un ser humano pintoresco, lleno de un humor extraordinario, que hacía de sus exposiciones en el aula un exquisito manjar.

Una de las notas curiosas de este sanjuanero, es que escribió su propio panegírico el 25 de diciembre de 1943, unos 46 años antes de su muerte, acaecida el 10 de octubre de 1989.

“Su cuerpo envuelto en los crespones rosáceos de la tarde, y cobijado por los mantos plateados de la noche, fue colocado sobre el féretro augusto de la melancolía…”, reseña una parte de la pieza.

En la Canción Doliente, expresaba: “Era de noche en el cielo y era de noche en la tierra/

¡Cuántas sombras en mi alma y cuántas almas en la sombra! El bombillo del espacio/ colgado del tiempo”.

Una mañana, invitó a un tímido estudiante a “explicar” ante sus compañeros el tema del día, pero el adolescente, mientras balbuceaba, miraba fijamente al profesor.

De inmediato Yaque le llamó la atención, advirtiéndole que se dirigiera a los alumnos, que no tenía por qué fijar su mirada en él… pero el atormentado expositor seguía desobedeciendo su mandato.

Entonces, optó por cruzar los brazos y darle la espalda, observándole de reojo, hasta que se percató que el angustiado alumno continuaba mirándole.

Precedido de un “boche a lo Yaque”, al insistente “mirón”, y dado que no podía abandonar el aula ni dejar de cumplir con su tarea, raudo se escondió debajo del escritorio.

Los aplausos de sus “fans” fueron tan estruendosos, que otros profesores acudieron a ver qué sucedía donde Yaque.