Raíces Radio

jueves, 15 de abril de 2021

Intoxicación por metanol


Por ANULFO MATEO PEREZ

I

La intoxicación por la ingesta adulterada de bebidas alcohólicas durante el pasado asueto de Semana Santa, ha dejado hasta ahora un saldo alarmante de 64 personas fallecidas y un número indeterminado de otras que sufren las secuelas del metanol (alcohol de madera), como ceguera, mareos y trastornos en la locomoción.

El metanol es un agente químico que se encuentra en productos de limpieza, anticogelantes, pinturas y barnices, usado en la fabricación artesanal ilícita de alcohol y venta al público de clerén, triculí y pitrinchi.

Se han presentado intoxicación y muerte de numerosas personas que han ingerido alguna bebida espirituosa, pensando que se trata de alcohol etílico, cuando en realidad está mezclado con metanol.

El empleo de alcohol de madera es una alternativa más barata para los fabricantes clandestinos de alcohol, pero provoca una gran morbimortalidad, muy a pesar de los tratamientos empleados en el país.

Se estima que el fallecimiento de pacientes intoxicados con alcohol metílico, oscila entre un 26 y un 50% y en los casos no mortales existe una gran cantidad de secuelas neurológicas y visuales, como la ceguera.

El metanol es de los alcoholes el de menor peso molecular, y al ser ingerido provoca cierto grado de embriaguez, precediendo manifestaciones clínicas atribuibles a la formación de metabolitos tóxicos.

El rango de aparición de los síntomas es de 1 a 72 horas, lo que en ocasiones se confunden con los mismos efectos del alcohol etílico, me refiero a embriaguez, mareos, euforia, locuacidad y depresión posterior.

Los metabolitos se producen por acción de la enzima alcoholdeshidrogenasa, encargada de metabolizar el alcohol, dando lugar al formaldehído, que a su vez es transformado en ácido fórmico, muy corrosivo.

II

La ingestión de bebidas alcohólicas que contienen metanol (alcohol de madera), da lugar al ácido fórmico, que inhibe la respiración mitocondrial, produce hipoxia tisular y acidosis láctica a nivel de 5,6. El paciente suele presentar molestias gastrointestinales diversas, visión borrosa, hasta pérdida de la misma.

Es evidente el deterioro neurológico progresivo, avanzando hasta la presentación de convulsiones y/o coma. Se mencionan como factores de mal pronóstico la presencia de estas condiciones y acidosis metabólica.

Basándose en su sabor y olor es imposible diferenciar el metanol del alcohol etílico. El primero se absorbe con rapidez y la concentración máxima en sangre se logra 30-60 minutos después del consumo.

El tratamiento consiste en inhibir la transformación del metanol en sus metabolitos y para que sea efectivo debe instaurarse de forma temprana, antes de que se haya formado una cantidad elevada.

Es importante que el personal de salud perciba a tiempo, que el paciente presenta intoxicación por metanol. Serán muy sugestivos los síntomas visuales mencionados, acompañado de acidosis metabólica.

En el examen físico se aprecian alteraciones pupilares que incluyen dilatación y pérdida del reflejo fotomotor. Más difícil es la situación, si nos encontramos ante un paciente en coma, con patologías de base.

El etanol (alcohol etílico), producido y vendido de forma legal, es potencialmente dañino para la salud, según la cantidad y frecuencia, y puede empeorar a pacientes con afecciones somáticas o psiquiátricas.

Apremia que las autoridades apliquen medidas para impedir la fabricación de alcohol adulterado; que se castigue a los responsables de esa práctica y controlen con mayor rigor el acceso a las bebidas etílicas legales.