Raíces Radio

sábado, 3 de mayo de 2014

¿Cuál democracia?

Por ANULFO MATEO PÉREZ

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Carlos Marx ni Federico Engels abordaron de forma particular, en tratado aparte, el problema de la Democracia. No obstante, en sus trabajos tempranos y maduros aparecen análisis importantes sobre la misma, que se proyectan en tres dimensiones esenciales. 

1. Su crítica incisiva estuvo dirigida a la falsedad de la democracia burguesa, que quiere presentarse como partidaria de la igualdad, los derechos de los ciudadanos y de la libertad. 

2. Marx y Engels citaron los reales límites de la democracia burguesa cuando es tomada como escenario de lucha de los trabajadores, enfatizando la contradicción capital-trabajo.

3. De igual forma destacan en sus aportes teóricos las características de la democracia socialista, cuya esencia es la dictadura del proletariado sobre los remanentes de la burguesía.

En 1843, Marx apuntaba una idea cardinal de sus juicios sobre el tema: la esencia de toda democracia plasmada en el derecho a través de la constitución es responder al pueblo.

Se refería el genio alemán y universal, a la democracia burguesa y su ideología, y fija sus primeras nociones sobre la temática, en “La crítica de la filosofía del Estado de Hegel”.

"En la democracia, la constitución misma debe aparecer como una determinación de los intereses del pueblo. En la monarquía, tenemos el pueblo de la constitución, en la democracia, la constitución del pueblo", precisaba Marx.

Concibe a toda forma de Estado no democrático como una enajenación de la justicia y de la verdadera libertad, como una negación sustancial de los intereses populares que debe representar.

Es decir, como una antítesis de la verdadera democracia, que es el poder para la mayoría y por la mayoría, dirigido esencialmente a satisfacer sus necesidades materiales y espirituales.

2 de mayo, 2014.

jueves, 1 de mayo de 2014

Políticos zacatecas

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Por violentar constantemente su propia legalidad, he calificado a los que gobiernan de espalda al país, de acicalados zacatecas y verdaderos sepultureros del sistema político que dicen sustentar.  Después de todo, les va muy bien como empleados de pompas fúnebres, que vestidos de librea asisten al entierro de esta falsa democracia, caracterizada por un rampante y desbordado canibalismo.

Las contradicciones entre grupos de poder por la preeminencia en el Estado, han llegado a un plano en que se vulneran los más elementales derechos ciudadanos, entre ellos, por supuesto, los políticos.

Como parte de la conspiración usan la perfidia, trampas, zancadillas, manipulaciones, sobornos, tráfico de influencia, entre otras malas artes, para imponer su reinado e intereses mezquinos.

El más reciente proceso electoral, contaminado con todas las perversidades e inmundicias politiqueras, es un ejemplo de la frialdad con que actúan los zacatecas de este modelo político en crisis.

Como verdaderos maestros de la tauromaquia, vienen dominando al conservador y cansado toro blanco, usando quintas columnas y colocándole banderillas en la JCE, TSE, SCJ… para el “vuelve y vuelve”.

 El nefasto ejercicio político de los que se han establecido como sanguijuelas en el Estado, se acompaña de ‘anestesia emocional’ frente a tantas injusticias en el orden político, social y económico.

 Los que gobiernan tienen el dominio de la situación; es inútil responderles con carabinas vacías. Entonces, habrá que “tirar el cuerpo al agua”, asumiendo la ya olvidada lucha social y política.

 La reciente masacre en Salcedo, nos dice hasta donde pueden llegar los continuistas. No conocen límites… y, llenos de miedo, han perdido la racionalidad. ¡Peligroso eso!


16 junio, 2012.

¿Democracia o cleptocracia?

Por ANULFO MATEO PÉREZ

La encuesta Gallup arroja, que el 82% de los entrevistados entiende que el país es corrupto, información conocida desde hace mucho tiempo, hasta por los chinos de Bonao.

Lo mismo sucede con los partidos políticos, la Justicia, la Policía, el Congreso y la Dirección de Persecución de la Corrupción Administrativa, consideradas como las más corruptas.

Un país sin una adecuada legislación ni cumplimiento de las normas que rigen los conflictos de intereses, socava sus frágiles instituciones.

Esos son los efectos corrosivos de la corrupción. El mal ha tomado tanto cuerpo que la mentada “democracia representativa” ha devenido en cleptocracia.

Por eso es que en una sola gestión gubernamental, los funcionarios terminan tan ricos que se ven obligados a disponer de sus fortunas a través de fundaciones. 

Los gobiernos tienen beneficios que repartir y costos que imponer al pueblo; elaboran programas de inversión, controlan una gran parte del PIB y regulan los sectores privados. 

Los funcionarios no se limitan a sustraer dinero del erario; se extiende al chantaje contra compañías nacionales y extranjeras o sus beneficios ilegales son productos del soborno. 

Usan testaferros para negocios ilegales, prevarican; es una manifestación de abuso de autoridad y, pese a que está sancionada por el Derecho Penal, nada sucede.

La impunidad permite que con el dinero del pueblo se alimenten campañas electorales y se compren voluntades para llegar al poder o mantenerse en él, lo que afecta la legitimidad de sus protagonistas.

En un país con independencia de poderes y verdadera justicia, la dimisión, destitución y prisión, serían parte del colofón de esa conducta. Esta media isla está muy lejos de esa realidad.

miércoles, 30 de abril de 2014

Momento catártico

Por ANULFO MATEO PÉREZ 

El amplio movimiento de jóvenes por la transparencia, contra la corrupción y la impunidad es el resultado del proceso de maduración social y ciudadana, que aspira a cambios verdaderos. Hemos llegado al “momento catártico” de conciencia social de importantes sectores nacionales.

Sin lugar a dudas, los jóvenes llevan la delantera, en una acción de “subversión desenajenante” de lo social, cultural y político. No hay que alarmarse, lo joven es casi siempre sinónimo de subversión.

Pero también lo es de lucha, perseverancia y cambios, como ocurre en otras naciones que han decidido corregir el rumbo de su propia realidad agobiante, ríspida, alucinante e insoportable.

A cada paso, los integrantes de esos sectores en ebullición han ido mutando de sujetos políticos a sujetos sociales, y han tomado las calles, como expresión de la crisis nacional en desarrollo.

Proceso que se incuba, fermenta y cataliza en la sociedad civil, que como decía Antonio Gramsci, es “donde se forma la voluntad colectiva, se organiza el convencimiento y la adhesión de las clases subalternas”.

Todo ello ayudado por el desarrollo tecnológico de los medios de difusión, que permiten la internacionalización de esa sociedad civil, que actúa en circuito, como ocurrió entre Madrid y Nueva York.

El movimiento de indignados crece como bola de nieve, ante el déficit fiscal, paquetazo impositivo y la debacle económico-social y ético-moral… a que ha conducido y conduce el PLD, Leonel Fernández, Danilo Medina y sus acólitos.

El desarrollo ascendente del pensamiento liberador implica la recomposición constante de su bloque histórico, y como un gesto de irrefutable valor político lo palparemos esta tarde en el entorno del “obelisco hembra” del malecón de esta capital.

 08 de diciembre del 2012.

Ética y medicina

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Mucho se habla en nuestro país de la deshumanización en los servicios de salud, tanto en el ámbito público como privado, pero pocos profundizan en sus causas y consecuencias.

En cuanto a los servicios hospitalarios y su personal, en particular a la relación médico-paciente, existe mucha confusión en profesionales de la salud, así como en los enfermos y familiares.

Respecto a los servicios del facultativo, no es lo mismo ser “buen médico”, que tener la condición de “médico bueno”.

Lo primero entraña preparación científica, respetar normas de ejercicio y rigurosidad en el manejo de los casos.  Lo segundo establece la solidaridad del profesional con sus pacientes y familiares.

Lo ideal en ese ejercicio es que el profesional de la medicina tenga ambos atributos: Ser buen médico y médico bueno, que nunca se debe confundir con el paternalismo en la relación médico-paciente.

El paternalismo médico se remonta a la antigua Grecia. Y aunque parezca paradójico, detrás de esa fachada se oculta la deshumanización; algunos sostienen, incluso, que éste es su causa principal.

La causa de la deshumanización no está en la falta de normas y supervisión, ni al desarrollo de la medicina y sus sofisticadas técnicas o a la falta de un exhaustivo examen físico del paciente.

Todo esto, más que causa es parte del problema planteado. El paternalismo médico es una forma de encubrir las posiciones dominadoras frente al paciente dominado.

Estamos en la era de la bioética y de las nuevas formas de la relación médico-paciente, que garantiza la dignidad del enfermo, que en todo caso no es objeto, sino sujeto respetado en sus derechos.

La humanización tendría un gran impulso si se estableciera un modelo basado en la absoluta gratuidad de los servicios de salud.

domingo, 27 de abril de 2014

Guía del ex izquierdista

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Las expresiones “derecha” e “izquierda” surgieron hace más de un siglo en el parlamento francés y en otros, como la Duma en Rusia, donde quienes apoyaban la monarquía se sentaban al lado derecha y a los que se oponían a ella se sentaban del lado izquierdo del pasillo central.

En Rusia, los bolcheviques ocupaban el lado izquierdo del pasillo del parlamento y los mencheviques el de la derecha, y desde esas equidistancias expresaban sus opiniones y confrontaciones en torno a los más candentes temas de la política, la economía y la filosofía.

Para algunos, el término “izquierda” es sinónimo de radical, revolucionario, socialista y comunista. El de “derecha” lo es de conservador, reaccionario, capitalista e imperialista. Estos dislates, en algunos casos, son compartidos por los que carecen de una formación política integral y por quienes conocedores de ellos, pretenden confundir a incautos.

Muchos “izquierdistas” han devenido en derechistas consumados; en sujetos que luego de un “mea culpa”, han terminando negando las ideas que decían defender para colocarse en posición nada edificante, acompañadas por lo general con prácticas alejadas de la ética política y haciendo compañía a los que ayer fueron blancos de sus críticas y accionar.

Se “limpian” de sus “pecadillos de juventud” a los ojos de los responsables de la desgracia del país. Se guían de aquella reflexión maniqueísta de que “se es imbécil a los 20 si no se es radical y se es imbécil si se sigue siéndolo”; que se pasa “de incendiario a los 20 a bombero a los 40”. Es decir, que se tuvo una juventud agitada antes de llegar a la edad de la razón.

Hablan del “fracaso” del socialismo; no se refieren a Fidel, sino a Castro y le anteponen el término de dictador en sustitución al de compañero. Para ellos, Chávez no es un revolucionario, sino un “loco populista”, con vocación despótica.

La falta de libertades en Estados Unidos y la docilidad de la gran prensa a los mandatos de Bush, son resultados del terrorismo, mientras a las medidas de seguridad de Cuba y Venezuela frente al imperio, la califican de “atentado a la libertad”.

Estos especímenes arrepentidos, son dados a descalificar al Estado, y lo etiquetan de ineficaz, burocrático, corrupto y corruptor, en contraposición a la economía “privada” y al “mercado”, con su dinamismo y capacidad de innovación tecnológica.

A los que mantienen las ideas de un país libre, independiente, soberano y con justicia social les llaman delirantes, “termocefálicos”, atrasados, fanáticos, fundamentalistas y otros calificativos despectivos.
Los ex izquierdistas, nunca fueron revolucionarios. No desbordaron los límites del resentido social… del rebelde sin causa; su problema es trascender, hacer su “revolución” personal, escalando hasta donde el sistema de injusticias y privilegios del “capitalismo salvaje” y decadente se lo permite, usando las malas artes que ayer impugnaban.

Por todo eso, y mucho más, guardan silencio o justifican que una obra de arte del entrañable y siempre recordado Silvano Lora, sea destruida en el recinto de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, para plasmar un “mamotreto” en su lugar, que resalta la figura de Joaquín Balaguer. Gente desvergonzada que se empeña, sin lograrlo, en borrar la historia y todo vestigio de dignidad y decoro. 

4 de febrero, 2007.