Raíces Radio

domingo, 26 de octubre de 2014

Ética y política

Por ANULFO MATEO PÉREZ
I 
Hoy más que nunca se hace necesaria analizar ética y política en la República Dominicana, sobre todo cuando las clases dominantes y sus representantes en la sociedad burguesa han separado los mismos en una praxis tan cotidiana, que han hecho de ello una regla en la conducción del Estado.

El tema preocupa desde tiempos remotos, cuando Nicolás Maquiavelo, entre el siglo XV y XVI, profundizó en el análisis de los principados en una Italia desarticulada. Esta realidad es descrita en su obra cumbre, El Príncipe.

En ella contrapone la ética a la política, muy a pesar de que en la actualidad sus defensores a ultranza lo consideran el mejor exponente y prístino de la mentalidad más avanzada de su época.

La comparación entre maquiavelismo y marxismo lleva a pensar en uno de los asuntos más importantes de nuestros tiempos, el de la relación entre política y delito de Estado.

En momentos de crisis y “resquebrajamiento moral”, como ocurre en la actualidad en nuestro país, quienes detentan el Poder sienten una gran atracción por el “comunitarismo” tradicional de la mafia.

Y en ese ámbito de corrupción en esta pseudo-democracia, tratan las infracciones a la ley como se tratan los asuntos domésticos en el seno de la familia, donde la ética y la política no son términos contrapuestos ni excluyentes.

Pero partiendo de realidades donde la ética y la política no son términos contrapuestos ni excluyentes, sino pilares de la conducta humana emancipadora, se debe distinguir entre “hermandad mafiosa” y “fraternidad política”.

Vistos los conceptos desde este ángulo crítico, la asunción indisoluble de los dos primeros términos viene a convertirse en una prolongación de la concepción antigua, clásica, de ellos. De la concepción griega, aristotélica.
II
La doble moral en la cultura burguesa es expresión directa de quienes intervienen en la política careciendo de un marco conceptual ético. Partiendo de esa premisa, podemos entender la conducta política de quienes expresan su vocación democrática cercenando los derechos del pueblo.

Así, expresan su lucha contra la pobreza y la asunción de ideales moralizadores, de soberanía e independencia, mientras reivindican históricamente a los sustentadores de regímenes nefastos como el de Trujillo. 

De modo que la parafernalia montada en cierta ocasión en el Palacio Nacional por Leonel Fernández para celebrar el centenario del nacimiento de Joaquín Balaguer, no sólo debe valorarse como oportunismo o “habilidad” política.

Esa conducta debe entenderse como una práctica “neomaquiaveliana”, que separa lo ético de la política. El alborozo en la sede de gobierno peledeista lo sustentaron aceptando como válida la vida y obra de Balaguer.

El cortesano de la era de Trujillo, ensalzado en el Palacio Nacional, se apartó de toda ética para satisfacer su necesidad psicológico-existencial, cuya adicción al poder fue consustancial a su personalidad.

Pero también fue vinculante a su pensamiento político-económico-social, inconmovible a los requerimientos de cambios y ruptura del estatus quo, representado por él y la clase social gobernante a quien le servía.

Para nuestro país ha sido traumática la incidencia política y dirección del Estado dominicano por los alumnos “más aventajados” del profesor Juan Bosch. Y frustratorios los esfuerzos intelectuales de él.

De nada sirvió que el autor de La Mañosa se esforzara para darle contenido “ético” al accionar del PLD. Su labor ha terminado pulverizándose, y en su huerto las “auyamas han parido calabazas”.

domingo, 12 de octubre de 2014

Las 11 víctimas del Robert Reid

Por ANULFO MATEO PÉREZ

No son once los niños fallecidos por atenciones inadecuadas en el Hospital Robert Reid Cabral de esta capital, sino miles los que han expirado en ese y otros centros estatales, cuyas verdaderas causas están en el modelo de salud y el bajo presupuesto que dedica el gobierno para asistir a la población.

Frente al escándalo, se buscan “chivos expiatorios” para salvar la “reputación” del gobierno, conformando una comisión interdisciplinaria que ha cargado el dado contra los médicos y la dirección hospitalaria.

Así, el criminal sistema de salud ni el gobierno irán al “banquillo de los acusados”, este se lavará las manos, el presidente Danilo Medina saldrá del “shock” y continuará un insuficiente presupuesto para salud.

Se pretende defender el desorden institucional en el Ministerio de Salud Pública, donde la auditoria médica y supervisión, entre otras acciones contenidas en los reglamentos, nunca se han puesto en práctica.

Si el presidente Danilo Medina ha elevado el grito al cielo y ha sido diligente para ordenar que se investiguen las muertes de los 11 niños, es porque los programas infantiles tienen supervisión internacional.

Por eso, no se hizo esperar la exigencia de la representante del Fondo de Infancia para las Naciones Unidas (Unicef), María Jesús Conde, para que el asunto sea investigado exhaustivamente.

Por el miedo al “cuco” de Unicef, las muertes intrahospitalarias en el ámbito materno-infantil causan cierto “alboroto”, pero todo continúa igual, tratándose de fallas del sistema de salud impuesto por el Estado.

El sistema no es sólo inoperante, sino que adolece de múltiples y groseras fallas en su aplicación, por ineficiencia, corrupción y politiquería. Ahora, a echar la “cuaba” a “chivos expiatorios”… y ¡“san se acabó”!

martes, 7 de octubre de 2014

Jamás podrán intimidarme



 Por ANULFO MATEO PÉREZ

El pasado martes 23 de septiembre, a las 9:15 de la noche, mi casa fue atacada a pedradas y dos grandes ventanales fueron destruidos, creando alarma en mi familia. La indignación del vecindario se dejó sentir y la solidaridad llegó a un punto que algunos se presentaron dispuestos a repeler la agresión.

Esta es la quinta vez en los últimos seis años que mi familia es agredida y los mismos ventanales son destruidos. No había revelado públicamente cada caso, para que mi anciana madre no se enterara.

He interpuesto las respectivas denuncias en la Policía y la Fiscalía. Hasta ahora, nada se sabe. En cambio, hackers al servicio del Gobierno han seguido saboteando el diario digital www.Barrigaverde.net, que dirijo desde hace 10 años.

De igual forma han robado la data de mi PC, cargándola a un archivo “Y”, procediendo luego a borrarla. Mi teléfono residencial ha sido intervenido, como es usual con otros ciudadanos “bajo toda sospecha”.

Hace unos dos años, recibí en mi casa la simpática visita de oficiales de la DNI, del SS de la Policía y de sus técnicos en informática, quienes buscaron en mi PC rastros de “hechos terroristas”.

Las pedreas se iniciaron el domingo en que Leonel Fernández le “ganó” la convención a Danilo Medina en el PLD, el mismo día en que esta columna había advertido el uso de los recursos del Estado para aplastarlo.

A las 7:25 de la noche de ese mismo domingo, mi residencia era atacada desde la calle lateral. Ahora, círculos de poder escriben un guión, de que las agresiones provienen de uno de mis pacientes mentales.

No obstante, tres meses atrás, dos sujetos fueron detenidos y liberados por la Policía. Lo se, quienes me hostigan tienen capacidad para atentar contra mi vida, pero jamás podrán intimidarme. Jamás.