Raíces Radio

domingo, 17 de diciembre de 2017

¿Renunciará el Presidente?

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Resulta que está planteada la posibilidad de que el presidente de la República dimita, ante las graves acusaciones de posible corrupción, pero si no lo hace sólo podría ser desplazado si el Congreso Nacional decide destituirlo, medida que por supuesto el mandatario rechazaría de plano, dadas las consecuencias.

No conozco el caso de un presidente que haya renunciado porque simplemente alguna instancia lo haya pedido, sean estas instituciones o personas; al contrario, lo que he visto siempre es la negativa a tal solicitud.

Ahora se explica que el representante del Poder Ejecutivo recibió coima por un monto de cinco millones de dólares por servicios a la empresa brasileña Odebrecht, envuelta en otros casos similares en el mundo.

Se revela que otros cuatro millones de dólares fueron también recibidos por el mandatario a través de una empresa conocida como First Capital, cuyos vínculos económicos niega, defendiendo su honor.

Y frente al escándalo, el presidente confiesa que sí estuvo vinculado a Odebrecht a través de una de esas consultorías de carácter financiero, a través de First Capital, para un proyecto manejado por la brasileña.

De igual forma se ha conocido de unos 780 mil dólares cobrados a la compañía brasileña por Westfield, empresa que se alega es de su propiedad, y en su defensa dice que nunca estuvo en la administración.

Las primeras reacciones de los congresistas de diversas tendencias ante las explicaciones de Pedro Pablo Kuczynski fueron de incredulidad, lo que deja abierta la vía de que defenestren al mandatario.

En una seria encrucijada se encuentra el presidente peruano Kuczynski, que tras el escándalo de Odebrecht hizo profundas críticas contra la corrupción de Estado, y quien fuera puesto de ejemplo de honestidad.

domingo, 10 de diciembre de 2017

¿Jugar a las elecciones?

Por ANULFO MATEO PÉREZ

De qué sirven las elecciones que se efectuarían en el 2020, si los árbitro-marionetas de ese proceso actúan conforme a los hilos que acciona el titiritero desde el Palacio Nacional, tal como ha sucedido hasta ahora en casi todas esas pantomimas que se han montado desde el ajusticiamiento del tirano Trujillo.

De qué sirve enarbolar programa de gobierno y candidaturas que sintonicen con los mayores anhelos de los electores, si los que están en el poder usan los recursos del Estado para imponerse a como de lugar.

De qué sirve el movimiento Verde marchando en calles y avenidas exigiendo el fin de la corrupción y la impunidad, si al final se le hace el juego al continuismo participando en unas elecciones manipuladas.

De qué sirven los esfuerzos por un país donde impere la igualdad de derechos, seguridad ciudadana, educación de calidad, salud para todos… si los que gobiernan reeligen todas las miserias que padecemos.

Si lo que deseamos es jugar a las elecciones, bien, hagámoslo, dejando como árbitros a la Junta Central Electoral, Tribunal Superior Electoral y Tribunal Constitucional que tenemos al servicio de este gobierno.

Si eso es lo que nos merecemos, entonces no exijamos justicia para los que se han robado el dinero del pueblo dominicano, los que abusan desde el Estado y luego son candidatos a los distintos puestos públicos.

Si por el contrario, nos consideramos parte del pueblo movilizado, entonces debemos cortar los fuertes hilos del titiritero, darnos una Constituyente Popular y la independencia de los poderes del Estado.

Y para ello, todos los implicados en el saqueo de los recursos públicos deben ser juzgados, llevarlos a prisión y devolver al Estado todo lo robado, evitando así lo que hoy sucede penosamente en Honduras.

domingo, 26 de noviembre de 2017

Como tigre al acecho

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Cesáreo Mayía, hombre respetado por amigos y allegados, era consultado con frecuencia cuando algún coterráneo necesitaba de sus sabios consejos para resolver alguna situación apremiante, dada la buena fama de que siempre acertaba en sus recomendaciones con el agradecido beneplácito de todos.

Al crecer su prestigio de hombre juicioso, a su paso por las calles de la hospitalaria ciudad los caballeros respondían a su saludo tocando el sombrero con la mano derecha y reverente inclinación de sus cabezas.

Un martes, el lugareño con más poder económico e influencia social le ofreció a Cesáreo un buen empleo a cambio de algún dinero, para que le dedicara la mayor parte del tiempo a su sabia y discreta consejería.

Sin embargo, más que recibir consejos o asesoría en sus decisiones corporativas o personales, a Desiderio Mendieta le interesaba tenerlo a su lado por el respeto ganado en buena lid durante largos años.

Ante una contingencia imprevista que se había presentado, don Desiderio solicitó al nuevo empleado dedicar sus esfuerzos en la dirección de una de sus empresas, que estaba quebrada por pésima administración.

Al poco tiempo, el establecimiento comenzó a marchar por mejor camino, lo que ansiosos esperaban don Desiderio, empleados y clientes, sin embargo, Cesáreo no había calculado los riesgos del nuevo trabajo.

Resulta, que una fiera mascota que don Desiderio consentía en su despacho, cruzaba en ocasiones a dormitar en el traspatio de la empresa, que el nuevo administrador dirigía con destreza y mucha confianza.

Un día, el tigre saltó por una ventana, atacó a Cesáreo por un costado, clavó sus colmillos en el cuello, apoyó su cuerpo contra su víctima y giró para dañar la yugular y columna vertebral, con la velocidad del rayo.

domingo, 12 de noviembre de 2017

Una lección para el gobierno

Por ANULFO MATEO PÉREZ
La aplastante derrota del gobierno que encabeza el presidente Danilo Medina en las elecciones del Colegio Médico Dominicano (CMD) debe servirle de lección y no insistir en su odiosa injerencia en los asuntos internos de gremios, sindicatos, colegios de profesionales, entre otras entidades liberales.
El doctor Wilson Roa, pese a las intimidaciones de los funcionarios del sector salud y dirigentes políticos oficialistas contra los médicos, ha ganado las elecciones con más de un 75 por ciento de los votos.
Con esa victoria se ha honrado la memoria de los doctores Julio Lyón, Heriberto de Castro, Francisco Henríquez y Carvajal, Pedro Delgado, José Brenes Ruiz, Pedro Garrido, Rodolfo Coiscou y Manuel Urraca.
Ellos, junto a los doctores Pantaleón Castillo, Leopoldo B. Pou, Rafael Alardo, José R. Luna, Abraham Santamaría, y los venezolanos Manuel Durán Bracho y Santiago Ponce, fundaron en 1891 la Asociación Médica.
Los doctores Salvador B. Gautier, Agustín Rodríguez Cabral, Darío Contreras, Fernando Batlle, Heriberto Valdez acompañaron en esos esfuerzos, que hoy se reafirman con el triunfo de la cordura y la decencia.
El gobierno y los dirigentes del PLD no entienden que los médicos se colegiaron el 19 de febrero de 2003, mediante la Ley 68-03, con derechos internos libérrimos, con autonomía y personería jurídica.
Es un esfuerzo inútil tratar de torcer el curso de una entidad centenaria, que como AMD siempre fue firme en sus propósitos y ahora como CMD recoge su historia gremial, científica y social de sus fundadores.

Apremia que los funcionarios de Salud se arrimen a la mesa a dialogar con el Dr. Wilson Roa y otros dirigentes del CMD; cumplir los acuerdos arribados el pasado año y buscar salida a los problemas hospitalarios.

domingo, 5 de noviembre de 2017

Poder y autoridad

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Los gobernantes impopulares en la República Dominicana olvidaron, o tal vez nunca lo tuvieron en cuenta, que para la existencia y reproducción del Estado es indispensable inspirar respeto y confianza, factores absolutamente indispensables para lograr el poder y la autoridad sobre los gobernados.

Por lo general se interpreta como sinónimo de poder la capacidad de coerción o de manipulación pese a la oposición de otros,  o lo que es lo mismo, el uso de la fuerza para imponerse ante lo demás.

Se garantiza la salud del Estado, con el respeto y la confianza obtenidos del pueblo, a los que se les suma el elemento consensual; no el exclusivo recurso de la coerción, que por lo general es sobrevalorado.

Lo que he afirmado precedentemente no debe confundirse con el concepto hegemonía, traducido al papel central que juega una clase social en una alianza con otros sectores, para transformar un estado.

En el caso actual del gobierno peledeista y sus predecesores, se ha enfatizado siempre en el elemento coacción, como “garantía” de una legitimidad inexistente, dada la tramposería en el proceso de su elección.

Hasta ahora, los gobiernos se han empeñado en usar la coerción de grupos político-corporativos sobre el pueblo, y sus limitadas alianzas han desconocido las leyes y Constitución que ellos mismos se han dado.

Estamos ante un gobierno sordo, ciego y mudo que carece no sólo de respeto, confianza y autoridad, sino de capacidad de gobernar, lo que puede conducirnos más adelante a lo que se conoce como “vacío de poder”.


Sumado a todo ello la corrupción, impunidad, podredumbre institucional, desconocimiento de los derechos e ingobernabilidad, es lo que ha ido abriendo el camino de una inevitable confrontación pueblo-gobierno.

sábado, 28 de octubre de 2017

Marcha Verde en ascenso

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Si hoy podemos apreciar el desarrollo incontenible del movimiento Marcha Vede por el cese de la corrupción y la impunidad, es porque este ha ido asumiendo la “pluralidad de la conciencia” para ese fin y reencausando la lucha por metas superiores, como son los cambios profundos en la sociedad dominicana.

A la movilización social contra el robo del erario por el funcionariado estatal y el capital parasitario, se han ido sumando las protestas de organizaciones populares y profesionales por sus reivindicaciones.

Estamos ante actores sociales que entienden que sólo la lucha firme y unitaria por los derechos ciudadanos, es la garantía de un cambio de rumbo de nuestro país hacia un pleno ejercicio democrático.

El ascenso cualitativo del movimiento social se aprecia por los niveles de conciencia cada vez más creciente de que hay que desmontar esta justicia podrida que nos lacera y conformar una Constituyente popular.

La creación de órganos que aprueben leyes y las apliquen garantizando los derechos de todos los ciudadanos por igual, que castiguen la corrupción, la impunidad, y por una Constitución del pueblo y para el pueblo.

Ahora se impone luchar sin descanso contra el caos institucional, mafias político-corporativas, inseguridad ciudadana, desempleo, ignorancia, insalubridad, chantaje oficial, clientelismo político y el sicariato.

Este “domingo verde”, con movilizaciones simultáneas en todo el país, demuestra el deseo del pueblo dominicano de terminar con este sistema de mafias partidocráticas que roban y matan con impunidad.


Esta presencia verde a nivel nacional es una voz de alto a las acciones de este y otros gobiernos, a los sobornos y sobrevaluaciones de Odebrecht, y a otros “tumbes” al pueblo, “que nunca se habían dado”.

domingo, 22 de octubre de 2017

La violencia del poder

Por ANULFO MATEO PÉREZ

El poder político puede ejercerse para bien o para mal, partiendo del concepto que se tenga de él y los fines para los cuales se ostenta; si se apoya sólo en las superestructuras del Estado de que se trate, o si se conjuga con la voluntad y acciones transformadoras del pueblo, que es para quien se debe gobernar.

Los “líderes” que están ejerciendo el poder en el Legislativo, el Judicial y el Ejecutivo, nada hacen para responder en lo absoluto a las necesidades de las grandes mayorías, sólo se representan a sí mismos.

Por lo demás, carecen de la educación que deben estructurar hogares funcionales, para forjar buenos ciudadanos, para respetar los derechos de los demás, el bien común y poseer la pericia y empatía política.

Esos llamados “lideres” no conocen el arte de saber escuchar y entender a los demás; no les interesa ponerse en el lugar de las mayorías; les importa un comino los problemas del pueblo y el deseo de superarlos.

Lo que aprecio en el poder políticos del peledeismo son a sujetos colmados de ambiciones, revanchismos y pasiones; apoyados en la fuerza para someter al pueblo dominicano a los más cruentos rigores de la vida.

Un poder usurpado al servicio del envilecimiento, el enriquecimiento ilícito, irrespeto a las normas de convivencia civilizada; el crimen, tráfico de influencia, chantaje, nepotismo y el caos generalizado.

Y esa violencia está vinculada a las acciones de la clase gobernante, a su ideología y abusos ejercidos desde el poder, generando desigualdades socioeconómicas, exclusiones y discriminaciones.

Entonces es compresible, que Marcha Verde sea la respuesta convergente a esa manifiesta coerción desde el poder, que daña a los pobres y a la clase media; que les niega el derecho al bienestar y sobrevivencia. 

domingo, 15 de octubre de 2017

La conversación

Por ANULFO MATEO PÉREZ

No se trata de cine, aunque podría ser material para un buen filme, sino del revuelo que han tomado las acusaciones de la administración Trump contra Cuba, respecto a los presuntos “ataques sónicos” contra personal diplomático estadounidense radicado en La Habana, dedicado a escuchar lo que otros hablan.

Por lo visto, el discurso y las acciones del Departamento de Estado van dirigidos a revertir lo que se logró de avance en lo diplomático y comercial entre los dos países durante la administración Obama.

Existe el interés en EE.UU. de retomar el camino de los peores momentos de la guerra fría, dada la gravedad de la acusación contra Cuba, en un asunto tan oscuro del espionaje y la manipulación política.

Expertos en el área tecnológica han admitido de los posibles daños que podrían provocar los sofisticados medios para espiar conversaciones, pero lo cierto es que nadie ha probado que sea cierto en este caso.

En tanto, a la historia fantasmagórica narrada por el secretario de Estado Rex Tillerson, le siguió, sin mayores detalles, el retiro de más de la mitad de los empleados de la embajada de EE.UU. en La Habana.

Días después, decidió que 15 funcionarios de la embajada de Cuba en Washington abandonaran el territorio de los EE.UU., sobre la base de que ha reducido su personal diplomático en la capital de la isla.

Esas medidas, sin una previa investigación de los “hechos” denunciados, se aderezan con la mendaz acusación de que el gobierno cubano no habría dado los pasos necesarios para prevenir ‘ataques’ sónicos.

Todo esto nos hace recordar el filme “La conversación”, del formidable director Francis Ford Coppola, donde un equipo de espías escuchaba las conversaciones de los demás, y la rítmica guaracha cubana “Chacumbele…”. 

domingo, 8 de octubre de 2017

La mano invisible

Por ANULFO MATEO PÉREZ

La crisis estructural por la que atraviesa la República Dominicana en el orden económico, social y político no es resultado del azar, sino de una secuencia de acontecimientos supeditados a las condiciones de un capitalismo atrasado y dependiente, que no ha podido superar el neocolonialismo.

Aunque Carl Marx le dio categoría histórica al azar, debemos pensar en todo el proceso que ha conducido a la sociedad dominicana hasta el punto en que nos hallamos y las causas de sus males ancestrales.

Ya para 1713, Joseph Schumpeter, en su libro “La fábula de las abejas”, aguijoneaba con su crítica el clima de la sociedad burguesa y el concepto de que los “vicios privados hacen la prosperidad pública”.

Cuando el presidente Danilo Medina promete “corregir lo que está mal” y “hacer lo que nunca se hizo” desde el marco ideológico que sustenta, trata de “cambiar algo para que nada cambie”. Es decir, prolongar la agonía del sistema con parches que no remedian los males que genera.

Antonio Gramsci había advertido que los gobernantes tratan de “ponerse en el bolsillo las demandas populares, encabezándolas e integrándolas desde arriba”, para desarmar, dividir y neutralizar a sus adversarios de clase.

En el caso dominicano, hemos apreciado, desde la aprobación del Código Agrario balaguerista, hasta la proclama danilista de la supuesta “revolución educativa”, que se limitan a meros gestos cosméticos.

La Revolución Francesa (1789), que tomó como una conquista burguesa “la igualdad ante la ley”, aún no inspira a los sustentadores del sistema, donde se practica la impunidad para los delitos de Estado. 

Es como si existiera una “mano invisible”, enigmática, ordenadora de los apetitos individuales, que convierte los vicios privados en virtudes públicas.

domingo, 1 de octubre de 2017

Violencia y salud colectiva

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Las conductas violentas son cada vez más comunes en la sociedad dominicana, lo que ha generado alarma como un problema de salud pública, si apreciamos los hechos y características de los mismos como son asalto-asesinato, masacre intrafamiliar, profanación de tumbas y violaciones sexuales.

Estos comportamientos van desde el abuso de género, incluyendo a menores, hasta el crimen en las calles y homicidios horripilantes; la gente vive con miedo ante la posibilidad de ser una de sus víctimas fortuitas.

Es obvio que la seguridad colectiva no sólo en las calles, sino en los propios hogares impacta en la calidad de vida de los dominicanos, que no ven alternativa por la falta de correctivos oficiales a esta situación.

Las pésimas condiciones materiales de vida de la mayoría de la población dominicana y disfunciones importantes en el cerebro de las personas violentas los mueven a dañar a familiares o a extraños.

La violencia es un factor que determina todas las actividades, desde los lugares frecuentados, el tiempo de permanencia en ellos, el tipo de seguridad prevaleciente, a qué hora se sale de casa, dónde se trabaja…

Nos preguntamos, ¿qué sucede dentro del cerebro de los multihomicidas y asesinos seriales y de asaltantes? ¿Cómo se desarrollan estas personalidades? ¿Existen regiones específicas que causen esta alteración?

En el cerebro existen zonas que regulan la conducta, que interactúan con el ambiente, determinando que se actúe de forma adecuada o violenta. La línea divisoria entre lo normal y lo patológico es muy tenue.

Lo sucedido en Sabana Grande de Boya, donde un hombre asesinó a tres familiares cercanos, hirió a otros y se suicidó, para luego ser profanada su tumba para decapitarlo, nos dice como anda la salud mental.

viernes, 22 de septiembre de 2017

Desastres naturales y salud mental

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Desde el ámbito de la salud mental, las emergencias y los desastres naturales implican una perturbación psicosocial que sobrepasa la capacidad de manejo o abordaje de la población, en lo individual, familiar y social de las víctimas, provocando ansiedad, miedo, tristeza, insomnio, frustración, malhumor o pánico.

El cuadro clínico se acompaña de cambios en el funcionamiento físico, como palpitaciones, tensión muscular, temblores, sensación de “vacío en el estómago”, opresión precordial, entre otras molestias somáticas.

Estas reacciones podrían ser transitorias o mucho más permanentes, que actúan como mecanismos de defensa que alertan y preparan para enfrentarse a situaciones traumáticas, que podrían lograr estabilidad.

Prepara a los afectados para la tolerancia a la frustración y la esperanza de superación de dificultades, pero si no logran capacidad para la adaptación, entonces generan crisis, rompiendo el equilibrio.

Esto puede suceder en catástrofes extremas, que vulneran las defensas de manera brusca, como el reciente terremoto en México o el desplome de las torres gemelas en Nueva York, el 11 de septiembre de 2001.

En estos casos aparecen reacciones físicas y psicológicas que ya no son protectoras, sino que conducen a ciertas alteraciones emocionales de gravedad y en algunos casos a verdaderas enfermedades mentales.

Se presenta una conmoción mayor en eventos inesperados, los provocados por el hombre, los que implican situación de estrés muy prolongado, que ponen en riesgo la vida, así como los de afectación colectiva.

Por todo ello, es que la Dirección General de Salud Mental, el SNS y Ministerio de Salud deben intervenir con urgencia en las poblaciones afectadas por el impacto de los efectos de los más recientes huracanes.

domingo, 17 de septiembre de 2017

Corrupción y distracción

Por ANULFO MATEO PÉREZ

El dictamen del juez Francisco Ortega, que cambió la medida de coerción a los imputados Víctor Díaz Rúa y Angel Rondón, de prisión en Najayo a una garantía económica, nos dice con claridad hacia donde el gobierno conduce el más escandaloso acto de corrupción oficial, conocido como el caso Odebrecht.

Prueba de que esa decisión procura la impunidad frente al cohecho, es la connivencia del procurador general Jean Alán Rodríguez, al presentar ex profeso un expediente mostrenco, pusilánime, anémico…

Hemos visto, además, cómo el poder mediático del gobierno se usó y se usa para dar mayor relevancia a penosos hechos de la crónica roja, politizar el huracán Irma, así como agitar el tema de la Ley de partidos.

Nada de esto es nuevo, si tenemos en cuenta que el control social se logra con la distracción, que consiste en desviar la atención del público de los temas de mayor importancia a otros de menor relevancia. 

Con su poder mediático, las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación continua de distracciones han sacado el tema Odebrecht-Punta Catalina de los medios bajo su dominio.

La estrategia inició al implicar a distintos sectores políticos y económicos en el escandaloso caso, para luego tomar medidas blandas con los apresados e ir degradándolo poco a poco hasta lograr la impunidad.

Y esa maniobra la conocían casi todos los imputados, que decidieron guardar silencio, y que antes había sido roto por Temístocles Montás y el señor Angel Rondón cuando se le dictó privación de libertad.

Igual estratagema contenida en el manual "Armas silenciosas para guerras tranquilas", le aplica el gobierno a la Marcha Verde para debilitarla y desactivar su lucha contra la corrupción y la impunidad.

Huracán Irma y salud mental

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Luego del paso del huracán Irma, las autoridades sanitarias deben tomar en cuenta a las poblaciones afectadas por situaciones de emergencia, para procurarles la debida protección a su salud mental y bienestar psicosocial, ya que pueden estar padeciendo pérdidas materiales y diversas afecciones de salud.

Los organismos para asistir a las personas en riesgo por el paso del referido meteoro deben agilizar la ayuda para evitar peores daños a los grupos más frágiles, que podrían presentar serias alteraciones mentales.

Posterior al paso de los poderosos huracanes David (1979), George (1998) y las inundaciones del Río Blanco -río Soulier- (2004) asistí a pacientes atormentados en San José de Ocoa, San Juan de la Maguana y en Jimaní.

En esas localidades hallé personas muy pobres con estrés postraumático; duelo por muerte de familiares y amigos; depresión con ideación e intento suicida y enfermedades mentales graves, moderadas y leves.

En las inundaciones de Jimaní, acudí como parte de un grupo de experimentados psiquiatras que integraba un amplio equipo multidisciplinario, abordando con apoyo emocional y psicofármacos a los más afectados.

Tras catástrofes naturales, como es el paso de un huracán, suelen incrementarse reacciones depresivas, furia, agresividad y un comportamiento suicida en la población impactada.

No obstante, apreciamos el contraste con otras personas que reaccionaron de forma constructiva tras la experiencia potencialmente traumática, actitud fuertemente vinculada con el desarrollo personal.

En estos casos se pueden apreciar la confianza en la propia capacidad para reconstruir la vida, y una firme sensación de fortaleza interior, que sirven de mucho apoyo a otras personas que no tienen esos atributos.

sábado, 2 de septiembre de 2017

El Waterloo del gobierno

Por ANULFO MATEO PÉREZ

El primer gobierno de Danilo Medina y cuarto del PLD, a pesar de su pésima gestión, sobrevivió a las dificultades en el orden económico, social y político por la falta de una oposición unida y crítica, contestataria a su proyecto continuista, así como a la dispersión y atomización del movimiento social.

En esa primera gestión danilista se profundizaron las contradicciones internas en el partido oficialista y se aceleró el deterioro de las instituciones representadas en el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Los servicios públicos entraron en franco deterioro, como ocurrió con la Educación –pese a la inversión del 4% del PIB- y la Salud, con el colapso de la mayoría de los hospitales, protestas y paros de labores.

El Banco Central informó de crecimiento económico, pero la realidad es que en esos cuatro años, pese al maquillaje de las cifras, la producción nacional cayó a sus niveles más bajos y creció el endeudamiento.

Como no es creíble, el mentado descrecimiento discreto de las importaciones e incremento de las exportaciones, con el sector agropecuario atrapado en los mayores reveses económicos hasta ahora conocidos.

El gobierno de Medina habló durante cuatro años de bonanza, crecimiento e incremento de la demanda de bienes y servicios que nunca llegó a la mayoría de los dominicanos sumidos en la pobreza más extrema. 

La burbuja comunicacional para publicitar el crecimiento económico, apoyándose en las maquilladas cifras del Banco Central, explotaba bajo el análisis del endeudamiento y la corrupción oficial.  

En su segundo mandato, Danilo Medina ha tenido su Waterloo, al revelarse las marañas tejidas junto a Odebrecht en torno a las plantas a carbón de Punta Catalina y el sostenido desarrollo de la Marcha Verde.   

sábado, 26 de agosto de 2017

Fiebre del oro en San Juan

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Ahora le tocó como escenario a la provincia San Juan, a la región Suroeste y a todo el país la amenaza en ciernes de la “fiebre del oro”, conocida como el período de migración apresurada y de forma masiva hacia California, EEUU, de personas que iban en caravana tras el oro en las entrañas de la tierra y los ríos.

Rufianes y aventureros que soñaban con hacerse ricos con el hallazgo de una veta del valioso metal, concurrían casi al borde de la locura con picos y palas; mucho después, se exploraba con mangueras de presión.

El frenesí por el oro se produjo en el año 1849, al coincidir en el tiempo las mejoras en los medios de comunicación (periódicos y transporte), que llevaban noticias y rumores sobre el negocio de ese recurso.

Esa “fiebre” la vienen padeciendo desde entonces las transnacionales, que lograron que el sistema monetario a nivel global se basara en el patrón oro, con apoyo de gobiernos afines a sus espurios intereses.

Ahora, la “hipertermia” y el frenesí llega a San Juan con la minera Gold-Quest, tal como viene ocurriendo con Falcondo contra Loma Miranda, en el Norte de la Cordillera Central y todo el Cibao Central.

De permitir que Gold-Quest explote el oro en Romero, en el lado Sur de la cordillera, se contaminarían y morirían el río San Juan, afluentes, y el Yaque del Sur, que recibiría sus aguas contaminadas.

La amenaza se enfila contra la vida de los suroestanos, dada la campaña por el oro emprendida por Gold-Quest, apoyada por la Dirección de Minería y el prolongado silencio del presidente Danilo Medina.

La explotación del oro de San Juan sería catastrófica para la producción de alimentos y las fuentes de empleos en toda la región Sur; contra esa amenaza a la vida misma, marchamos firmes ayer en San Juan.

domingo, 20 de agosto de 2017

El rey Mudo

Mudo era un rey muy afortunado, que gobernaba en el país de una media isla, situado en el mismo trayecto del sol. Tenía todo lo que un rey podía desear. Vivía en un hermoso palacio, rodeado de cortesanos, de grandes jardines y bellísimas rosas; era poseedor de inmensas riquezas, pero no podía articular palabras.

Cuando se comunicaba lo hacía mediante el lenguaje de señas. Pese a sus riquezas, Mudo pensaba que la mayor felicidad le era dada por unos billetes verdes, que guardaba en una tinaja debajo de su alcoba.

Se levantaba en las mañanas contando billetes verdes… se reía… se reía, y luego los tiraba hacia arriba para que les cayeran encima en forma de lluvia. A veces se cubría con ellos, riendo tan feliz como un niño.

Cierto día, el dios de la construcción, Marcelo, pasaba por su reino y uno de sus acompañantes, de nombre Joao, se quedó retrasado, cansado, y decide dormir un rato en los jardines del palacio.

Allí lo encuentra el rey Mudo, quién lo reconoce al instante y lo invita a pasar unos días junto a sus cortesanos. Luego lo lleva al dios Marcelo y este muy agradecido por la gentileza le ofrece un único deseo. 

-“Me has dado tal placer al haber cuidado de mi amigo, que por eso quiero concederte un deseo”. Mudo respondió con señas, frotando el dedo índice con el pulgar, que multiplicara sus billetes verdes.

Su majestad comenzó a construir carreteras, acueductos, hidroeléctricas y plantas a carbón en su reino, por supuesto con la ayuda del dios Marcelo, y todo lo que tocaba se convertía en billetes verdes.

Un día, el dios Marcelo dejó de serlo, pues advertido en su reino de que era un impostor fue llevado al calabozo, y el dios conciencia castigó al rey Mudo, despertó y tiñó a su pueblo del mismo color de los billetes.

domingo, 13 de agosto de 2017

Camino al desfiladero

Sólo alguien que viva en las nubes o reciba el beneficio del desorden institucional, la corrupción y la impunidad puede negar que vivimos una crisis importante en el orden económico, social y político, resultado del fracaso del modelo neoliberal y la globalización, sustentados por los gobiernos del PLD.

El 18 de agosto de 1996, en su tercer día de mandato, Leonel Fernández anunció un plan de privatización y reestructuración de las empresas estatales y luego se produjo el despido masivo de sus trabajadores.

Apoyada en ese modelo, la pequeña burguesía desalmada privatizó lo que era del pueblo dominicano, y la Corporación Dominicana de Empresas Estatales (CORDE) pasó a manos del capital nacional y transnacional.

Como en la época de Jack el Destripador, fueron sacrificadas la CDE y las 24 compañías que integraban CORDE, y los dominicanos nos quedamos “sin pito y sin flauta” o lo que es igual “como el perico en la estaca”.

No hay lugar a dudas, del impacto de las crisis en el proceso creciente de la pobreza, la desigualdad y el enriquecimiento de la minoría, aumentando a medida que son cada vez más frecuentes y profundas.

En ese orden, la inequidad ha sido una constante en el reparto de los recursos del país, de los que genera nuestra economía y de los procedentes de los alegres empréstitos a organismos financieros internacionales.

La carga de todo ello ha ido creciendo en la espalda de la clase trabajadora, chiriperos y campesinos, de los desempleados, así como de los distintos estratos de la clase media, que va camino a desaparecer.

Con Danilo Medina se han agravado esos males, multiplicando la corrupción y la impunidad, creando el caos, llevando al pueblo dominicano como ganado a un profundo, oscuro y peligroso desfiladero.

domingo, 6 de agosto de 2017

Un gobierno atrapado

Por ANULFO MATEO PÉREZ

La crisis de credibilidad y desempeño no la va a resolver el gobierno de Danilo Medina descalificando a los sectores que componen el movimiento Marcha Verde, que demandan el fin de la corrupción, la impunidad y el caos, ni tampoco acudiendo a la represión contra las crecientes y justas protestas sociales.

La debacle de este gobierno era previsible, desde que se impuso la reelección del presidente, que incumplió desde su primer mandato con las promesas de campaña, entre ellas, terminar con el robo al erario.

La situación se le ha empeorado por su conexión con el caso de corrupción Petrobras-Odebrecht en Brasil, que acorrala a sus amigos Lula da Silva, Dilma Rousseff y tambalea al presidente Michel Temer.

Ahora se suma a la crisis, la brutal y ominosa represión contra los jornaleros cañeros, que exigen su pensión, y el repulsivo asesinato del dirigente popular francomacorisano Mario Vladimir Lantigua Baldera.  

Como podemos apreciar, el gobierno ha decidido enfrentar al movimiento social, que demanda un cambio de rumbo de la sociedad, con manipulación mediática, represión indiscriminada y selectiva.

Es un pésimo cálculo del oficialismo, responder a las demandas sociales con métodos intimidatorios, que lejos de fortalecerle, les hacen perder mucho más el escaso crédito y estabilidad que le sustenta.

Confrontar el movimiento Marcha Verde, que crece como una bola de nieve contra la ineficiencia y el desorden de los tres poderes del Estado, es apostar a la violencia y al agravamiento de la crisis.  

Es evidente que el oficialismo está atrapado en sus propias e intrincadas redes. Si la represión del Estado contra el pueblo garantizara la permanencia de malos gobiernos, América tuviera plagada de dictaduras.

domingo, 30 de julio de 2017

El poder de la mentira



Por ANULFO MATEO PÉREZ

El profesor estadounidense de la Universidad de Stanford, Robert Proctor, acuñó el término “agnotología” para referirse al estudio de la ignorancia o duda culturalmente inducida, sobre todo cuando se trata de la publicación de datos científicos erróneos o tendenciosos, para manipular a blancos determinados.

Pero también, el concepto ha ido más allá para adentrarse en la sociedad por medio de fuentes del secretismo militar o judicial y por medio de políticas deliberadas, emanadas desde el poder político.

En otras palabras, es un concepto más acabado que la demagogia tradicional o la simple manipulación para ingenuos, porque la ignorancia inducida se sostiene desde el punto de vista falsamente conceptual.

Me refiero a lo que se conoce como “postverdad”, sustentada en distorsionar la realidad, hasta el extremo de poner en duda datos científicos irrefutables, como parte de la tecnología de la desinformación.

En la lucha política e ideológica, es frecuente que el demagogo recurra a la degradación del debate por medio de la retórica de la desinformación y la manipulación, para que este gire en torno a premisas falsas.

Es lo que hace el gobierno al enfrentar la Marcha Verde; o cuando usa las armas de distracción masiva; o falsea datos sobre lo acontecido con el caso Odebrecht o crea una falsa historia de lo acontecido.

Cuando instrumentan un plan mediático, como la defensa del proyecto Punta Catalina, los estrategas trabajan para negar la credibilidad de las fuentes irrefutables en los hechos que les desfavorecen.

Asumen como fin ulterior, la producción intencionada de ignorancia, con la ayuda no sólo de políticos y publicistas, sino también de grandes medios de comunicación y periodistas comprados o voluntarios.

domingo, 23 de julio de 2017

¿Contramarcha?

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Pese el desarrollo de la Marcha Verde y su más reciente demostración multitudinaria el pasado domingo, ninguna sorpresa debía esperarse en las decisiones del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), que dominado por el oficialismo ha movido las piezas a su favor en el ajedrez político dominicano.

Por lo que es la tradición de los que han detentado el poder, el gobierno de Danilo Medina ha producido los cambios del gatopardismo, “cambiar todo para que nada cambie”, reforzando su hegemonía grupal.

De manera que la elección de las altas cortes es una respuesta política al movimiento anticorrupción y a la partidocracia, así como a los adversarios del “danilismo” a lo interno del PLD, que siguen en jaque.

En el arte militar, la contramarcha es toda operación, movimiento o maniobra en que un cuerpo de tropas en acción toma una dirección contraria a la que llevaba hasta ese momento para distraer al enemigo.

Esta táctica es muy distinta a la retirada rápida, en una maniobra de engaño al enemigo, o al repliegue, que se caracteriza por la organización ante las adversidades en el terreno de la confrontación militar.

Nada de esto ha hecho el gobierno, sino que por el contrario ha decidido golpear a todos los que le reclaman un cambio de rumbo, hastiados de tanta corrupción, impunidad, ineficiencia, desorden e inseguridad.

Algunos conformistas entienden que el CNM se decidió por lo menos malo, porque dejó a un lado a los anteriores miembros de las altas cortes, pero en realidad lo que hizo fue cambiar a Quevedo por Malpica.

En tanto, el gobierno seguirá la ruta contraria al pujante movimiento Marcha Verde, que con firmeza espartana exige el cese de la corrupción y la impunidad, un peligroso y obstinado desafío a la confrontación.  

sábado, 15 de julio de 2017

Los entresijos del poder

La imposición del neoliberalismo a nivel planetario por el poder unipolar, a través del FMI y el Banco Mundial, ha sometido a la República Dominicana durante décadas a graves problemas socio-económicos, diezmando las luchas reivindicativas en desarrollo, como ha sucedido con otros países de América Latina.

Inflación, desempleo, disminución de los niveles salariales y de la calidad de vida, las bajas inversiones en los sectores productivos, han conformado un conjunto de fenómenos que lastiman el tejido social.

El PLD en el poder abrió las puertas a la criminalidad en sus más diversas expresiones, fracturó los lazos sociales, banalizó la actividad política, acentuó el clientelismo, así como el tráfico y consumo de drogas.

Sus gobiernos son culpables de esta debacle, resultado también de la privatización de las empresas estatales y enajenación de sus riquezas; pérdida de la soberanía y putrefacción de las instituciones públicas.

Sin embargo, el momento político ha cambiado por la irrupción del movimiento Marcha Verde, que demanda justicia ante la corrupción e impunidad, a un poder que conculca los derechos de las grandes mayorías.

Los dominicanos han despertado del encantamiento, para ver con toda claridad los entresijos del poder peledeista, que los obligó a prosternarse, mientras unos pocos se apropiaban del patrimonio público.

Ahora el gobierno se empeña en convencer que la razón es pura subjetividad, fruto de la duda y la crítica incierta, para llevar confusión a sus opositores que exigen paz, orden, justicia social y económica.

En tanto, desde el Palacio Nacional se manipula el caso Odebrecht, con el propósito de llevar pesimismo y frustración a la Marcha Verde, que este domingo muestra su firme y vigoroso mensaje de esperanza.

sábado, 8 de julio de 2017

Fortaleza de la Marcha Verde

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Es la naturaleza y práctica del gobierno del PLD apoyarse en el poder del Estado para someter a las grandes mayorías nacionales a sus funestas políticas públicas, y en cambio favorecer sólo a las corporaciones transnacionales, la burguesía parasitaria y las élites políticas, que traman eternizarse en el poder. 

Los que desgobiernan olvidan que la razón puede dar poder a los sometidos; hacer conciencia de ella les mueve a organizarse y luchar en defensa de sus derechos, de su dignidad y supervivencia.

Marcha Verde ha surgido como resultado de la maduración del proceso social y político, así como por el agravamiento de la crisis económica, los servicios públicos y la manifiesta inseguridad ciudadana.  

La vitalidad de ese movimiento radica no sólo en la razón, sino en la presencia del pueblo militante, el espíritu de justicia, y de la unidad en la diversidad por el fin de la corrupción, la impunidad y el desorden.

El gobierno maniobra para desactivarlo; por su lado, otros lo alientan para controlarlo, sin embargo, todos esos esfuerzos han fracasado porque sus integrantes han elevado sus niveles de conciencia política.

En el proceso, la clase dominante y sus gobiernos se han ido quitando la careta al violar sus propias reglas y clavar las garras de la corrupción… mientras la gente aprende con una velocidad inimaginable.

Hasta ahora, el movimiento ha protestado contra toda esa podredumbre de forma pacífica y ordenada, pero si el oficialismo insiste en confrontarlo de forma obstinada, podría llamar a la desobediencia civil.

En tanto, en su denuedo por el rescate del país, el próximo domingo Marcha Verde mostrará nueva vez su fortaleza y firme rechazo a las burdas maniobras del gobierno, de la claque empresarial y mediática.  

sábado, 1 de julio de 2017

Jugando a la politiquería

Por ANULFO MATEO PÉREZ

La clase dominante y la partidocracia tradicional que le sirve, son los responsables de la crisis económica, social y política del país, resultado del manejo irresponsable del poder y las groseras violaciones a su Constitución, que modifican a su medida, y a las leyes que aprobó un Congreso Nacional subordinado.


Ellos se han confabulado para apropiarse de los bienes del Estado y privatizar los servicios públicos, ante los ojos de un pueblo que se mostró desconcertado hasta que se empoderó al marchar contra ese desorden.


Esa partidocracia ha desgobernado a sus anchas; practicando el nepotismo como norma; sobrevaluando las obras públicas y endeudando al país con empréstitos, de los cuales una parte termina en sus bolsillos.


El sistema político que desde hace décadas ellos han construido, sólo admite en los cargos públicos a redomados corruptos, y se han amalgamado los poderes Ejecutivo, Judicial y legislativo; los tres en uno.


Un inmenso poder en manos del presidente de turno, para conformar grupos mafiosos que arrasan con las instituciones del Estado, desafiando a la gente decente que rechaza su conducta delictiva.


En tanto, los dominicanos padecen inseguridad ciudadana; violencia oficial y de la delincuencia común; insalubridad; desempleo; falta de techo familiar y la coacción del libre ejercicio de sus derechos.


Estamos ante un país en crisis, donde se ha ido entronizando el autoritarismo y la represión contra el que disiente del oficialismo, zarpazos desesperados de una dictadura institucional decadente y putrefacta.


La reacción del gobierno ante ese valladar no ha sido rectificar, sino seguir jugando a la politiquería; sumergido en el lodazal… cavando su propia tumba, al paso cada vez más vibrante de la Marcha Verde.

sábado, 24 de junio de 2017

La renuncia del Presidente

Por ANULFO MATEO PÉREZ

Para los sectores conservadores, la petición al presidente Danilo Medina de que renuncie a la primera magistratura del Estado resulta contraproducente, perturbador del “orden democrático” y un retroceso para la sociedad, admitiendo así la fragilidad en que se sustentan los poderes públicos.

Ningún terremoto social o económico ocurrió en Estados Unidos cuando el republicano Richard Nixon se vio obligado a dimitir de la Presidencia el 8 de agosto de 1974, tras el escándalo por el “caso Watergate”.   

La renuncia de Nixon no paralizó las actividades económicas, políticas ni sociales del imperio; al contrario, estas discurrieron sin mayores tropiezos institucionales y el sistema político salió fortalecido.

El presidente Otto Pérez Molina renunció al cargo mediante una misiva, el 2 de septiembre de 2015, tras la Fiscalía haber emitido una orden de captura para juzgarlo por corrupción, y Guatemala no sucumbió.

Enrique Peña Nieto ha sido conminado en más de una ocasión a renunciar de la presidencia de México, expresión de un manifiesto ejercicio del derecho ciudadano a revocar su mandato, sin mayores consecuencias.

La derecha venezolana no sólo ha exigido la renuncia del presidente Nicolás Maduro, sino que realiza de forma obstinada repudiables actos terroristas para derrocarlo, sin lograr romper el orden democrático.  

Que un grupo de ciudadanos haya pedido la renuncia del presidente Danilo Medina, es la expresión del ejercicio de sus derechos ante tanta frustración y desaliento provocados por los gobiernos peledeistas.

La alharaca que esta demanda ha provocado en los conservadores, desnuda el atraso político, la debilidad institucional y el concepto mesiánico de unos pocos sobre el rol de la figura presidencial en el país.   

domingo, 18 de junio de 2017

Crimen y sistema político

Por ANULFO MATEO PÉREZ

El sistema político impuesto por las clases dominantes durante décadas en la República Dominicana, ha entrado a una etapa de aceleramiento de su crisis estructural, y tendrá que ser desplazado por los sectores que lo advierten como una seria amenaza a su estabilidad, desarrollo y supervivencia.

Este sistema pervertido, que en el pasado dio origen a regímenes oligárquicos, despóticos, excluyentes, represivos… ahora ha creado en su interior estructuras criminales y abiertamente desafiantes.

En los partidos que le dan sostén a este sistema decadente impera un pérfido método de financiamiento de oscura procedencia, convirtiendo a esas anacrónicas organizaciones en peligrosas entes mafiosas.

Desde que se inició la práctica de puertas abiertas para el financiamiento ilícito, la fortaleza de los viejos partidos no ha descansado en su programa político ni en propuestas a la sociedad, sino en el dinero.

A esa partidocracia le gusta nominar a candidatos millonarios, cuyos recursos provienen de transacciones ilícitas, con gastos excesivos en las campañas electorales… sumándose las débiles regulaciones.

Por esa notoria laxitud ética en los controles del financiamiento, las estructuras criminales echan raíces en esos partidos; así logran proteger sus negocios, fortalecer la red mafiosa y expandirse sin límites.

La apertura a individuos y grupos criminales ha permitido que estos controlen esas entidades políticas, ocupen posiciones claves en el Estado, es decir, en el Congreso Nacional, Poder Judicial y en el Ejecutivo.

El caso Odebrecht es un ejemplo del gran atraco al erario, que genera desigualdad, exclusión y agitación social… en un momento en que esa mafia está atrapada, lo que la empujaría al  asesinato político.